El jueves pasado estuvo en la sede de Casa Popular Valeria el juez de Familia Santiago Arrondo, quien realizó esta visita en el marco de una impronta personal de llevar "el Estado a los barrios". En la institución conversó con sus miembros y atendió las demandas de mujeres y adolescentes que aprovecharon para hacerle consultas de primera mano. "La verdad que fue muy enriquecedor, muy importante, estuvimos muy agradecidas del encuentro", indicó una de las integrantes Hosanna Cazola.

A través de las redes sociales desde Casa Popular indicaron que el titular del Juzgado de Familia Nº 1 de Olavarría, quien asumió pocas semanas después de que comenzara el aislamiento por el Covid-19 , "expuso el trabajo que vienen realizando y se puso a disposición para trabajar en conjunto con el equipo de abordaje de violencia de género de nuestro espacio".

No todo se puede resolver con un protocolo

"Mantengo reuniones periódicas con todos los actores de la ciudad, quería conocer el lugar y creo que el Estado tiene que salir a los barrios", indicó de forma categórica el juez Arrondo a EL POPULAR. Entre los propósitos mencionó la necesidad de "explicarles a las chicas que concurrieron cómo funciona todo el circuito de las denuncias y que se saquen dudas y miedos". En el Juzgado local gran parte de las causas que tramitan son por violencia familiar y de género.

La asistencia en un caso de violencia de género en mayo pasado fue lo que acercó a Cazola y la Casa Popular Valeria con el Juzgado de Familia. "Hemos creado un vínculo importante", refiere Cazola, quien explicó que en esa instancia Arrondo la convocó para "ver qué tipo de abordaje hacíamos nosotros, de qué manera podíamos acompañarla", y desde ese entonces existía la promesa de la visita que se dio el jueves pasado para conocer el espacio.

La referente del Ministerio de las Mujeres indicó: "A nosotras nos pareció re importante bajar la barrea del prejuicio de lo que uno considera que hay del otro lado, viendo de que es una persona y tiene intenciones de realmente solucionar las problemáticas. Y también desde el lado de quienes trabajamos en el Estado, pensar que no todo se puede resolver con un protocolo, muchas veces es muy necesario hacer excepciones o conocer las realidades más profundamente".

Para el grueso de las mujeres, realmente

el estado siempre se representa en la policía

"El juez fue muy claro ayer (por el jueves) cuando expresaba de que la perspectiva de género no es algo que llega y se instala de un momento para otro, sino que hay que construirla, hay que tener la decisión política personal para poder incorporarla, para poder repensarse todo el tiempo en la práctica", agregó Cazola. Destacó además que recibió de manera privada a mujeres y adolescentes quienes les expusieron sus problemas.

Fiscalía y policía

Cazola destacó que no es común el tipo de iniciativa que tuvo el juez Arrondo, quien les refirió "la necesidad de estar en contacto con las organizaciones que trabajan temáticas de género porque por supuesto necesita deconstruirse todo el tiempo y revisar sus prácticas".

La referente de CPV expuso a este Diario que "casi siempre lo que nos sucede es que somos algunas las que sabemos cómo funciona el circuito, cuáles son los lugares a los que hay que acudir, pero para el grueso de las mujeres, realmente el estado siempre se representa en la policía, en la cuestión de control. Poder tener al juez como también hemos tenido el acercamiento con las responsables de la comisaría De la Mujer, los responsables del Ministerio Público Fiscal (MPF), de que ellas conozcan a las personas que trabajan y se pueda generar un vínculo, eso acerca muchísimo, da confianza, y se pueden resolver las cuestiones de manera más rápida, más personalizada".

  • El vínculo con la comisaría De la Mujer y el MPF lo logran a través de las reuniones de la Mesa Local contra la Violencia. En el caso de la dependencia policial agregó que tienen encuentros especiales cuando se dan situaciones puntuales en los que "nosotras consideramos que es necesario revisar algún tipo de practica de la comisaría".

En este contexto Cazola indicó que "una de las cuestiones más difíciles que nos cuesta con la comisaría De la Mujer tiene que ver con la revictimización" cuando se acercan a realizar las denuncias. Describió que al llegar la víctima debe describir "delante de todas las personas que están en esa sala cuál es la situación que se está atravesando para luego poder ingresar a hacer la denuncia. Nosotros estamos reclamando que eso no puede suceder, si una persona se apersona en una comisaría es para realizar una denuncia sobre una vulneración, no tiene que ser la instancia de revictimización".