Transporte público y pandemia, entre la necesidad y los protocolos
Es incontable la cantidad de personas que por razones laborales, estudiantiles, médicas y muchos ejemplos más, deben utilizar el servicio público de transporte. Esto trae consigo altos riesgos y temores tanto entre los usuarios como en el personal.
Subís al colectivo, se ve al chofer "aislado" en su cabina realizada improvisadamente con nylon para evitar el contacto y la cercanía con los pasajeros. Barbijo correctamente colocado, como ya es costumbre. Pagás tu boleto, mirás el colectivo con la esperanza de que haya poca gente y no tengas contacto con nadie. En ocasiones se cumple tu deseo, en otras ves todo lo contrario: Un servicio prácticamente colmado y con solo unos pocos asientos disponibles pegados a otra persona. Suspirás. Tomás asiento, ponés alcohol en gel en las manos. Te mantenés lo más lejos posible de todas las otras personas presentes y esperás llegar a destino lo más rápido posible.
Así es el recorrido de cada usuario de transporte público en tiempos de pandemia, aquellos que inevitablemente deben viajar para cumplir sus obligaciones y, en muchos casos, generar los ingresos necesarios para subsistir. Es por esto que el servicio cumple un rol fundamental ya que es el medio de transporte que miles de personas utilizan diariamente.
Años atrás nadie dudaría en utilizar el transporte público, pero actualmente surge un gran interrogante… ¿Es seguro?. Ya es conocida la recomendación de las autoridades nacionales de evitar su uso habitual debido al gran movimiento de personas. Este es el puntapié inicial que provoca el interrogante mencionado.
El distanciamiento social es el gran punto afectado, es inevitable la cercanía con otras personas cuando el servicio se encuentra colmado y se genera un ambiente incómodo y de temor en gran parte. Uno siempre intenta cumplir las normas y recomendaciones que provienen del Estado, pero en ocasiones, lograrlo se hace imposible.
Diversos usuarios del servicio manifiestan que en muchas ocasiones "viajar con una gran cantidad de personas genera temor, al haber mucha gente es imposible cumplir con el distanciamiento y uno nunca sabe si el otro se cuida o no. El miedo ante el contagio siempre está", asegura una usuaria a Agencia Comunica.
Sin embargo, agradecen que el servicio se mantenga activo y les permita viajar diariamente. "Somos muchos quienes nos tenemos que trasladar desde nuestro pueblo hacia la ciudad ya sea por trabajo, por estudio o demás; y la única forma de hacerlo para quienes no contamos con vehículo propio es en colectivo. Uno se acostumbra a viajar todos los días y sabe de qué manera cuidarse y también cuidar al otro", expresa un usuario que se transporta desde Sierras Bayas a Olavarría regularmente.
Otro punto importante que se destaca entre los usuarios es la reducción de los servicios a causa de la pandemia. En tiempos "normales", el servicio de la empresa "Ola Bus" (Transporte interurbano) se extendía desde las 6:00 AM hasta altas horas de la noche, merodeando las 00:00 horas y con frecuencias horarias de una hora entre cada salida del colectivo. Actualmente la realidad es muy distinta, ya que se tuvo que reducir la circulación, la frecuencia horaria es mucho menor y en el mejor de los casos, el último servicio es a las 20:00 o 21:00 horas, depende el día y la línea.
Ramiro Di Giano, titular de la empresa Ola Bus, afirma que actualmente con los horarios que se aplican no han recibido reclamos por parte de los usuarios."Hemos tenido que cambiar los horarios dependiendo la fase en la que se encuentra la ciudad y las restricciones activas". Los horarios van variando, al igual que la ocupación de los colectivos, hoy en día el promedio de ocupación es de "alrededor del 30% de la capacidad total", explica Di Giano.
En relación a la ocupación total de los vehículos, el empresario comenta que "la cantidad de pasajeros que se puede transportar según normativas de Nación y Provincia es la totalidad de asientos del colectivo y durante la hora pico se permiten 10 pasajeros parados. Al estar la máxima capacidad agotada, el colectivo no puede llevar a ningún pasajero más y lamentablemente quien no pudo subir deberá esperar el próximo colectivo".
El andar y la ocupación de los transportes ha ido variando, al comienzo de la pandemia y todo el tiempo que la ciudad estuvo en fase 1, hubo una corta circulación del transporte pero en marzo de este año "la actividad venía en alza entonces brindamos más servicios y mayor disponibilidad de horarios".
El sistema de fases y restricciones influye directamente en la circulación de personas y por lo tanto, en la utilización del transporte público... "Menos restricciones; más pasajeros. Más restricciones; menos pasajeros", reflexiona Di Giano.
Por otra parte, un punto de inflexión y que es de vital importancia para la población gira en torno a los protocolos que debe cumplir cada pasajero al viajar, frente a esto Di Giano comunica que "solo se le pide el uso del tapabocas todo el tiempo. Y la gente cumple con esta norma".
Colectivos urbanos
En otro eje referido al transporte urbano, también se evidencia un mayor uso que hace meses atrás. Y es lógico debido a la presencialidad en las clases y las diferentes actividades que realiza la sociedad. "Cuando tengo que viajar en colectivo intento estar lo más lejos posible de otra persona para cuidado de todos los que estamos ahí en ese momento", afirma un usuario frecuente del servicio de la empresa "Tu Bus".
Desde otro punto, otra persona que frecuenta el uso del transporte urbano explica que en los horarios pico sube mucha gente al colectivo y todos se amontonan. "Es inevitable". El transporte urbano realiza sus recorridos cada una hora, esto genera que tanto en las paradas del colectivo como dentro de ellos haya un gran caudal de personas.
"Si la frecuencia de los colectivos fuera mayor y pasaran cada 15 o 30 minutos, esto se solucionaría, no habría tantos amontonamientos. Esa situación enoja bastante porque es obvio que subimos muchos más si pasan cada casi una hora".
Otra situación que incomoda a los pasajeros se refiere al protocolo y su cumplimiento: "El único protocolo que te exigen es el uso del barbijo e incluso hay gente que no lo utiliza de la manera correcta y no se le dice nada".
Agencia Comunica intentó en varias ocasiones comunicarse con el referente de Tu Bus, pero resultó imposible el encuentro para conocer cómo se trabaja desde la empresa en esta nueva etapa.
"El transporte público es un lugar en el que inevitablemente muchas personas están juntas, debería haber más protocolos y exigir que estos se cumplan, reducir la gente que puede subir a los colectivos, que haya más circulación de estos para que no todos suban al mismo, son solo ideas que pueden permitir mayor seguridad y comodidad. Todos viajamos obligadamente y queremos estar lo más tranquilos posible mientras lo hacemos" concluye uno de los usuarios. (Agencia Comunica – Facso)