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"No más presos por plantar", fue un reclamo que encontró una respuesta legal en noviembre del año pasado. La Argentina legalizó el cultivo de cannabis con uso medicinal. Las reglas del juego cambiaron, o no tanto.

El médico e investigador Enrique "Uyi" Bintana contó acerca de la existencia de un consultorio cannábico en la Clínica María Auxiliadora que actualmente recibe de manera mensual casi 200 consultas mediante el denominado sistema de telemedicina, y a través de la que tratan patologías tan sencillas como trastornos de sueño o migrañas, hasta otras más complejas, como lo son las enfermedades oncológicas. Sin descartar los tratamientos tradicionales para aplacar el dolor, que, en palabras del especialista, "deprime y mata" a quien lo sufre en forma sostenida.

El Gobierno nacional reglamentó parcialmente la ley 27.350, más conocida como ley de uso medicinal de la planta de cannabis y sus derivados, sancionada por el Senado de la Nación el 29 de marzo último. Reglamentó solo tres de los 12 artículos referidos a los objetivos del programa. El punto principal establece que "las acciones de promoción y prevención deben estar dirigidas a las personas que, por padecer una enfermedad bajo parámetros de diagnósticos específicos y clasificados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se les prescriba como modalidad terapéutica el uso de las plantas de Cannabis y sus derivados".

Entonces, ¿qué cambió?

"Lo que ha cambiado es la apertura y eso en cierto modo ha sido guiado por evidencia. Está bien que de lo que más se habla es de epilepsia refractaria y sobre todo del paciente oncológico, pero hay otras patologías en las cuales se está trabajando con buenos resultados", rescató Bintana en una entrevista concedida a EL POPULAR.

Al llegar a ese punto, el profesional enumeró: "cuidados paliativos no oncológicos, o sea la artrosis básicamente que es una patología que todos lo vamos a llevar arriba a partir de los 60 ó 70 años".

"En el consultorio de cannabis ves bien lo que significa el hueso. El hueso se queja desde las 8 de la mañana hasta que te fuiste a dormir", expuso el doctor con un tono empático, como de quien además de verlo todos los días lo conoce, lo reconoce y desde hace tiempo trabaja para poder quitarlo. De hecho remató, "el dolor si es muy intenso hasta te deprime".

Ahora, rápidamente buscó dejar en claro para no crear falsas expectativas que "tampoco es milagroso el cannabis. En general es una droga que convive con todas las drogas" porque como lo repitió durante la charla, "el cannabis no vino a excluir, vino a convivir".

El trastorno del sueño

La ansiedad, las crisis de pánico y los problemas para dormir, también se intensificaron durante el último año en medio de la pandemia y la cuarentena obligatoria. Sobre este tema, Bintana contó que el cannabis "convive con las benzodiacepinas, tenemos 6 millones de ciudadanos tomando benzodiacepina para dormir" y enseguida dijo: "no significa que la vas a sacar, la mayoría de las veces vas a reducir la dosis", porque según entendió "el trastorno de sueño hoy es uno de los principales problemas de salud".

Hizo una lista importante de patologías que pueden y podrían tratarse con cannabis medicinal. Otra es la migraña "que genera mucha invalidez laboral, que es territorio de la mujer 9 a 1 y que en general, es una mujer abusadora de ergotamina. Entonces el cannabis te sirve para discontinuar ese abuso y tiene muy buena evolución" sentenció.

También para la ansiedad, porque "convive con un ansiolítico, con antidepresivos".

Para personas que sufren de fibromialgia, otra patología común en la mujer hoy, "o sea, no es una droga que viene a excluir y a sacar sino que viene a convivir con otras, con las que ya están y que te permite no tener tantos efectos adversos" remarcó.

Entonces, después de las sobradas pruebas científicas, él afirmó que "desde ese punto de vista yo creo que el cannabis tiene muchas líneas".

Adelantó además que el grupo interdisciplinario del que participa con la Facultad de Ingeniería contará con la colaboración de una neuróloga, la doctora Marina Canabal -olavarriense- "para que trabaje con nosotros y vamos a incursionar en una línea que tiene que ver con el deterioro cognitivo y demencia, que es una patología que se ve cada día más".

Telemedicina

¿Quién sabe que en la Clínica María Auxiliadora funciona un consultorio cannábico? Por el boca en boca, a la antigua. Bintana tiene más de 30 años de trayectoria y un poco más de investigador. Desde hace algunos años logró producir cannabis de manera tal que a través de distintos vehículos, produce medicina. Llegar a este punto requiere años, práctica, investigación, dedicarse, medir, probar y errar. Y acertar claro. Poder combinar las propiedades de una planta junto con otros activos y ponerlo en un gotero, en uno que un médico puede recetar cuantas gotas porque pudieron pasarlos a propiedades por mililitros.

"Nosotros trabajamos con dos cepas que hemos estudiado y tenemos analizadas", plantas que han logrado extraer casi el 100% de las propiedades que se esperan.

El consultorio cannábico local atiende casi 200 consultas por mes que llegan a través de telemedicina.

Vale resaltar que aún este tipo de medicina no es cubierta por las obras sociales, sin embargo el doctor elucubró "si lo cubriera el PAMI, tendrías 6 millones de abuelos con un frasco en la heladera, porque lo van a usar para el dolor, para dormir, para todo" consideró.

A pesar de ser una medicina "que se paga del bolsillo" como indicó Bintana, no es inaccesible si se tiene en cuenta el precio actual de cualquier medicamento.

El tabú de la marihuana

Desde los ‘60 a hoy, del Woodstock a "no más presos por plantar", todavía cuando se habla del cannabis hay ciertas barreras. Sin embargo parecen ser propias del desconocimiento porque como contó quien responde a las consultas, "en general no tengo que convencer a nadie, la gente mayor es la menos prejuiciosa. La gente me viene a ver directamente para salir ya con el cannabis" indicó.

"Lo que se viene es la telemedicina" afirmó "Uyi". Quizás sea también algo más de lo que trajo la pandemia para quedarse. "Las consultas presenciales van a quedar para patologías más agudas" comentó de cara al futuro que le ve a la medicina tradicional como la conocemos hoy.

Es justamente a través de la telemedicina que muchas personas llegaron al consultorio cannábico. A través de una aplicación donde uno debe completar los datos, hay unos "40 síntomas dominantes de guardia, desde ardor al orinar, tos, vomitos, diarrea, etc. más que nada orientado a lo que es urgencias y tenes la posibilidad de cargar las fotos de los medicamentos que tomas y de los informes que yo voy a ver de tomografias, o resonancias" detalló el doctor.

Una vez cargados los datos y paga la consulta, Bintana los miércoles los dedica a atender a estos pacientes.

El médico en ningún momento dejó de poner sobre la mesa que lo que se necesita es estudiar, juntar evidencia porque "que esto sirva para patologías como migraña, sueño o deterioro cognitivo, eso no tiene precio".

El dolor mata y eso se refleja también en el tipo de pacientes que llegan al consultorio. "La mayoría de las consultas son por dolor, 7 de cada 10 personas que entran son por dolor. Dolor por la artrosis, la fibromialgia, la neuralgia. El dolor mata. Deprime y mata. Es muy jodido tener dolor todos los días". Contra eso lucha desde hace 40 años, para que las personas no lo padezcan. Y desde algunos otros, encontró la respuesta en el cannabis medicinal, ahora en Argentina despenalizado para sus múltiples usos.