Escondido detrás de la excusa de que está presente en la sociedad, o el argumento pueril (en el mejor de los casos) de que responde al folclore de la cancha, el fútbol argentino se ha venido permitiendo desde hace mucho tiempo niveles de violencia intolerables

No es la única la violencia la de esos delincuentes que eufemísticamente se conocen como barrabravas. Está esa violencia simbólica que baja desde las tribunas en forma de canciones o banderas. La violencia física que sube desde el campo de juego, tomada con laxitud desde lo reglamentario, desatendida por el periodismo y con la connivencia de una justicia deportiva tan devaluada como la Corte y otros estamentos de la Justicia ordinaria.  

La violencia política, encarnada en Arsenal de Sarandí o Sportivo Barracas, que a su turno pasaron de la nada a competir en primera división ya se sabe cómo. Y más… 

Cuando parecía que ya nada podía superar todo lo padecido y denunciado, el domingo se produjo una bestial agresión en Gonzales Chaves de un veterano futbolista a una joven árbitra. El repudiable hecho aconteció durante un partido de tercera división de la Liga Regional Tresarroyense de Fútbol, que disputaban el local Independencia y Deportivo Garmense. 

Dalma Cortadi fue la víctima, Cristian Tirone el cobarde que le aplicó un golpe de puño en el cuello y luego la pateó en el suelo. 

QUIZÁS TE INTERESE: Agresión a una referí: "Nunca pensé que iba a suceder algo así"

"La psicóloga le recomendó a Dalma que por unos días trate de procesar todo lo que le está pasando. Más allá del dolor físico, está muy angustiada, y en estas circunstancias lo mejor es que evite hablar del tema o revivir la situación que vivió" narró Vanesa Quintana, la mamá de Dalma Cortadi, en comunicación telefónica desde Tres Arroyos. "Ella ahora necesita tranquilidad y buscar también la calma en lo emocional porque está como agotada y sin fuerzas por todo esto" describió. 

Dalma fue sometida a nuevos estudios, que revelaron un traumatismo de cráneo a un costado de la nuca, contusiones en varias partes del cuerpo y una severa contractura en la región cervical. "Sigue muy dolorida, está con un cuello ortopédico y según lo que dijo el médico tiene los hematomas por dentro. Está en reposo y muy asustada, aunque tiene mucha contención de la psicóloga, que nos comentó que cada segundo que siga reviviendo la agresión le va a afectar aún más en lo emocional" contó. 

Vanesa se fue enterando con el correr de las horas que el agresor tenía antecedentes que deberían haberle impedido ingresar a una cancha de fútbol. "Después de lo que sucedió con mi hija la gente nos fue contando que se trata de una persona muy agresiva, que había tenido episodios parecidos con otros árbitros. Como que la gente empezó a recordar cosas, y nos dijeron que tiene antecedentes violentos inclusive con sus compañeros" manifestó. 

Dalma no sólo fue víctima de agresión física por parte de Cristian Tirone. "Su hermano la trató muy mal también durante todo el partido, más allá de que no la haya golpeado" añadió. "Está claro que esta persona venía muy decidido a llevar a cabo su agresión. No hay palabras para calificar su nivel de brutalidad, porque no sólo le pegó una trompada por la espalda, sino que además la pateó en el piso. Y avanzó insultándola" recordó Vanesa. 

El dramático relato de madre siguió con lo que Dalma le confesó cuando se reencontraron, horas después de la agresión: "Me dijo 'mamá, sentí que me iban a moler a golpes'. La realidad es que le podría haber costado la vida. Gracias a Dios se pudo levantar".

"No hay derecho a andar por la vida a los golpes. Espero que mi hija se recupere del dolor de su cuerpo y también del dolor que siente en el alma, porque soy consciente de que esta persona la marcó para el resto de la vida" proyectó Vanesa.  

"Ella no sabía lo que era la violencia, es una chica súper cariñosa, siempre vivió rodeada de amor, y que venga una persona y la maltrate de este modo es tremendo" dijo. Se supo el lunes que Tirone (quien permanece detenido y fue suspendido de por vida por la Liga de Tres Arroyos), pidió "disculpas" y declaró estar "avergonzado y arrepentido" por lo sucedido. 

"No le creo, tampoco acepto que pida perdón porque son mentiras, son frases de circunstancia. Lo hubiese pensado antes de pegarle a una mujer. Evidentemente él se sentía libre de pegarle a una mujer de la forma que se le dé la gana" acusó. 

"Con todo el respeto, le hablo a la mamá del agresor y le digo qué siente en este momento. Le pediría también que se ponga en mi lugar y en el de mi hija y piense en lo que hizo su hijo. Me gustaría saber también si alguna vez le dijo a su hijo que a una mujer no se le debe levantar la mano" planteó la mamá de Dalma Cortadi. 

"Nuestra labor como familia ahora es cuidarla y resguardarla en lo emocional. Después está lo otro, que quedará en manos de los abogados, pero obviamente queremos que siga detenido para que sirva de ejemplo a cualquier hombre que quiera comportarse como este individuo. No se puede andar por la vida con tanta violencia" reiteró. 

Vanesa insistió en que "lo principal para nosotros ahora es mi hija, que se recupere. Aunque reconocemos que le va a costar muchísimo. Su pareja me contaba que se despierta sobresaltada a la noche, con llanto, que tiene sensación de miedo. Como que está viviendo hasta en sus sueños este drama que tuvo que vivir". 

"Nadie merece lo que le pasó a Dalma. Espero que haya un poco más de respeto, porque lo que se ve en las canchas de fútbol es lamentable, y que cambien las leyes. Tienen que ser más duras para estos casos. No podemos esperar una fatalidad para que reaccionen nuestros legisladores y nuestros jueces" reflexionó. 

Vanesa agradeció las muestras de solidaridad y apoyo de toda la sociedad tresarroyense, del periodismo local y regional, de los estamentos vinculados con el fútbol argentino y de los organismos provinciales vinculados con la seguridad en los escenarios deportivos. "Agradecemos el apoyo y el repudio de todo el mundo" expresó, aunque no olvidó y advirtió que Dalma y sus colegas han debido padecer otro tipo de violencias en los partidos de la Liga de Tres Arroyos. 

"Casi siempre la acompaño y en un partido que ella estaba de 'línea' me tocó ver como casi le rompen la cabeza con una botella de agua. Los insultos de los jugadores, de los técnicos y de las hinchadas son de lo más común. Es tremendo lo que los árbitros tienen que soportar domingo tras domingo" denunció. 

"Por qué tenemos que esperarla un rato largo después de los partidos por seguridad; por qué tienen que vivir con miedo de salir de una cancha y ser agredidos" se preguntó Vanesa Quintana. "A mí me encanta ir a la cancha, llevar el mate y mirar el partido cuando tiene que dirigir Dalma o cuando mi hijo juega, porque es futbolista, pero no se puede convivir con semejante nivel de violencia" exclamó. 

Dalma trabaja como maestranza en el Hospital de Tres Arroyos y no es árbitra por una cuestión económica, ni tiene al arbitraje como una segunda opción laboral. Lleva el fútbol impregnado en su vida desde la misma partida de nacimiento: "De mi papá somos una familia futbolera. Hay mucho fútbol en la mesa, cuando nos juntamos a tomar mate, y se llama Dalma por la hija de Diego Maradona".  

"Ella siempre fue de ir a la cancha, es muy hincha de Boca, está todo el tiempo viendo partidos y tiene una pasión muy grande por el fútbol" relató Vanesa. "Más allá de que el arbitraje lo toma con la seriedad de un trabajo, ella lo ama" aclaró su madre. Es una chica multifacética. "Además tiene otra pasión, porque es cantante de un grupo de cumbia de acá de Tres Arroyos" reveló. 

Cuando Dalma decidió volcarse al arbitraje, toda la familia se encolumnó detrás de ese sueño. "Lo que ella decida de acá en más va a contar con nuestro apoyo -anticipó Vanesa-, pero es una guerrera, es muy valiente y esto le va a dar más fuerzas para luchar por lo que le gusta y por su pasión, que es el fútbol".