@JosefinaB

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Hoy se cumplen diez días desde que se conoció el veto del Ejecutivo a la eximición de 50% para pymes y comerciantes en la Tasa de Seguridad e Higiene. La ordenanza que se había aprobado por mayoría en el Concejo aplicaba por todo 2021 el descuento a quienes hubieran facturado hasta 36 millones de pesos. Se buscaba colaborar con el sector comercial más golpeado por la recesión y la pandemia en Olavarría. En este lapso, fueron varios los organismos y voces de la oposición política que rechazaron la decisión de Ezequiel Galli y hasta rebatieron sus argumentos.

El jueves, en la sesión del Concejo Deliberante se aprobó la propuesta para el mismo sector que impulsó el Intendente. En realidad se refrendó, puesto que ya se aplicó y terminó su vigencia. La ordenanza fue aprobada por unanimidad y convalidó lo que se había aplicado por decreto: Galli dispuso ese mismo descuento (50% en Seguridad e Higiene) durante dos meses -junio y julio- para los contribuyentes de la primera categoría y quienes facturaron hasta 20 millones de pesos.

El veto del Intendente no fue sorpresivo. Dos señales adelantaron la decisión: justamente que el Ejecutivo impulsó su propio proyecto con un descuento muy reducido en el tiempo, y que el bloque Juntos votó en contra de la ordenanza en el Concejo cuando se aprobó el 26 de agosto. No obstante, al conocerse públicamente el veto, hubo cuestionamientos y hasta quien lo consideró "sorpresivo".

Entre los más fuertes, estuvo Comerciantes Unidos que definió que desde el Ejecutivo "una vez más dejaron claro que no hay un `mimo´ al sector, que estamos solos, que solamente nos exprimen cada centavo". En paralelo plantearon quejas porque no son atendidos sus pedidos de reuniones, lo que consideraron como "negar la existencia de todo un sector económico".

Entre los últimos en pronunciarse, se escuchó a la Unión Industrial que presentó las cifras de recaudación por la Tasa de Seguridad e Higiene para afirmar que el volumen que percibió el Municipio fue mayor que lo que arrojó la comparación con el índice de inflación interanual. "El estado municipal -durante el último periodo- no ha tenido problemas en sus ingresos y –al mismo tiempo- denota la falta de respaldo a las pequeñas y medianas empresas que generan trabajo y dan impulso a nuestra ciudad" sostuvo la entidad.

Ambas entidades coincidieron en pedir "un alivio" para el sector con el descuento y "un gesto" por parte del Ejecutivo, para enfatizar que el descuento en sí no implica un cambio demasiado grande para las finanzas de los comerciantes y empresarios, ni tampoco afecta sustancialmente la recaudación municipal.

Las voces en el HCD

En la última sesión ingresó formalmente el veto del Intendente. Para rechazarlo se necesitan dos tercios de los votos, algo que a priori no parece posible de conseguir. No obstante, recién esta semana que empieza pasará a comisión para su tratamiento interno.

Pero el jueves ya empezó el debate, al menos para la oposición. Dos bloques se pronunciaron sobre el tema: el Frente de Todos -autores de la ordenanza- y Ahora Olavarría. Por el interbloque, Ubaldo García y Juan Sanchez avanzaron con críticas tanto para rebatir los argumentos que contiene el veto como para exponer a Ezequiel Galli. Por el unibloque, Celeste Arouxet apuntó a críticas de tono partidario. El oficialismo ni habló del tema.

García apuntó a la "facultad" del Legislativo para establecer normativas de eximición de pago, algo que Galli sostuvo que no puede hacer y que por eso se vetaba la ordenanza. Y también cuestionó que los dos meses de eximición que aplicó el Intendente son "totalmente insuficientes".

Luego Arouxet dijo responder al "pedido que nos está solicitando el sector comercial", y solicitó a los concejales "que nos pongamos en lugar de esa gente que no tiene la suerte de tener un sueldo todos los cinco depositado en un cajero". En referencia a la ordenanza vetada reiteró durante su aloución que "era aplicable" y sostuvo que el Ejecutivo la vetó porque la había originado la oposición: "tenemos que entender que cuando el otro presenta algo que está bien hay que acompañarlo".

Sánchez retomó este último aspecto: "el egoísmo político perjudica a los ciudadanos" subrayó para volver a señalar la importancia de "los emprendedores" afectados por "la baja en la productividad en este último tiempo".