La advertencia fue llamativa. Dardo Chiesa, titular de Confederaciones Rurales Argentinas, declaró que "el precio de la carne está inaccesible para muchos, pero hay muchas cosas inaccesibles". Tras ello, Chiesa recomendó consumir menos carne y más de los otros alimentos.

A este lo cruzó el titular de la Cámara de la Industria de Carnes de la República Argentina (Ciccra) Miguel Schiariti, quien señaló que "Hablar de consumir menos carne es decir no me importa el consumidor más fiel que tengo. Desde lo económico y comercial no es una frase muy feliz".

La polémica generó un clima especial y la idea de que algo extraño podía estar pasando con la carne. O que estaba faltando o que se insinuaba o había llegado a valores impagables.

Pero nada de esto ocurrió. Para el carnicero local, José Vigo, "los cortes principales no están más altos y si ha caído la venta no es por el valor de la carne sino porque la gente tiene menos plata y menor poder adquisitivo".

De todos modos, aclaró que "la venta bajó entre un 5 y un 10 por ciento" pero igualmente advirtió que la gente ha ido suplantando la carne de vaca por la de lanar, pollo y porcinos.

Consumo interno

Para Vigo, y refutando lo que dijeron los dirigentes nacionales, "la carne sigue siendo el producto que más rinde. Un kilo de milanesa sin preparar cuesta 250 pesos a 280 pesos, mientras que las pastas caseras se han ido por las nubes. Lo que pasa es que la gente tiene menos plata o los sueldos están atrasados con respecto a los precios. Pero la carne mantiene los mismos valores desde hace tres o cuatro meses. Es más, y aunque fueron centavos, algo ha bajado".

Para Vigo, no quedan dudas que se está consumiendo menos pero por factores ajenos al precio de la carne. "Es que la gente tiene aumentos de todo tipo, de tarifas, de alquileres, y el sueldo no le alcanza. Por eso se consume menos". A su juicio, la gente se las rebusca, mecha carnes, compra cerdo, lanar, pollo...,porque no es verdad que las pastas sean más baratas. En casa, cada vez que se compran pastas, pizza, nos damos cuenta que son más caras que la carne. Los sorrentinos son impagables".

En cambio, añadió, "un kilo de milanesas, preparadas, se hacen casi dos y pueden comer casi ocho personas. Por eso, sigue rindiendo mucho más la carne que cualquier otra cosa. Eso sí, la merma de la venta está entre un cinco y un diez por ciento

Entonces, la polémica desatada a nivel nacional sobre el precio y la necesidad de reducir el consumo de la carne vacuna, fue absolutamente refutada por el carnicero local basándose en datos concretos de la realidad. "si uno la compara con otros productos, la carne está barata", dijo Vigo.

Al parecer, el tema tendría que ver con la eventual apertura del comercio con la Comunidad Europea y la preferencia de exportar antes que derivarla hacia el mercado interno.

Si para Vigo el consumo se redujo en casi un 10 por ciento, para el titular de la Ciccra, la venta cayó en un 12,1 por ciento", sostuvo. A mediados de abril, desde el gobierno se había anunciado que habría descuentos y la venta de algunos cortes por un valor de 150 pesos, algo que finalmente se concretó pero en algunas carnicerías.