Se cumplen 61 años del nacimiento de Diego Armando Maradona
Este 30 de octubre será diferente a los demás, no estará el cumpleañero, no estará Diego Armando Maradona, al que se vio públicamente por última vez hace un año atrás en la cancha de Gimnasia y Esgrima La Plata, en una imagen que preocupó por su estado de salud pero que no fue suficiente alarma para evitar que 26 días después falleciera en medio de un inmenso dolor popular.
Maradona siempre fue un ídolo popular. El mismo se definió como tal y se diferenció del concepto de figura pública. Por eso no extrañó que sus seguidores pidieran "la cabeza" de los apuntados.
Y, como en muchas, el mismo tiempo le dio la razón. Desde su partida física no paró de crecer su imagen, en murales, en homenajes, en documentales, en conflictos de índole personal y en historias.
"La muerte de Maradona dejó un gran vacío, nos llenó tanto que su ausencia dejó un gran vacío. No podemos decir que era inesperado porque la última aparición pública de él fue dramática, muy expresiva sobre el final de su vida", reconoció hace meses Jorge Valdano, en una entrevista con La Caja Negra, programa emitido por Filo.News.
Tan esperada como inesperada porque Diego acostumbró a todo el mundo a revivir de las cenizas, a romper los límites de la salud y a salir siempre bien parado, pero esta vez no sucedió y por eso lo que debiera ser su cumpleaños 61 se convertirá en una fecha de reflexión y nostalgia.
Si gambeteó la muerte en enero del 2000 en Punta del Este, cuando ingresó a la clínica en estado de coma y con un cuadro de hipertensión y arritmia debido a sus excesos, cómo no iba a gambetear esta vez. Ya no era el mismo Diego, en su corazón anidaba la tristeza por la muerte de Doña Tota y Don Diego, que fueron dos puñaladas que nunca cicatrizaron.