El viernes pasado los había aumentado 9,5 por ciento. O sea, con respecto a marzo, ahora Shell aumentará un 5 por ciento.

Así, los nuevos precios en CABA serán: V-Power nafta, $47,67; Super, $41,48; V-Power diesel, $45,95 y Fórmula Diesel, 39,57 pesos.

La marcha atrás llega un día después de que YPF aumentara sus productos un 4,5 por ciento.  "Con esta rebaja la petrolera, que sorprendió al mercado con un aumento cercano al 10%, se acomoda al resto de la competencia", destacaron desde la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA), minutos después del anuncio de Raízen.

El aumento del viernes, ahora corregido, fue el tercero de Shell en lo que va de 2019: un 2,09% a principios de febrero y un 2,8% en de marzo. En la primera semana del año la petrolera había rebajado el precio de sus combustibles en menos de 1 por ciento.

En marzo el Gobierno desdobló el llamado Impuesto a los Combustibles Líquidos, o ICL.

El sábado YPF comunicó que desde el día después, el litro de sus naftas Super e Infinia subiría un 4,55% y los combustibles diésel (D500 y Infinia Diesel) un 4,89 por ciento.

"Los aumentos reflejan el efecto de variables clave para la conformación de los precios, como son el aumento en el ICL (Impuesto al Combustible) e IDC, el tipo de cambio y las variaciones en el precio del Brent", destacó la petrolera estatal, que aseguró que "ha venido buscando adecuar dinámicamente sus precios en los últimos meses, a fin de atenuar el impacto de los aumentos en el consumo de naftas y gasoil".

En ese sentido, la empresa aseguró que en el último semestre "el mercado ha sufrido una baja del 6,3 por ciento".

Fuente:Infobae.com