El 19 de marzo, unas horas antes de que Alberto Fernández decretara la cuarentena total en la Argentina, Marcelo Tinelli viajó a Esquel para pasar en su casa de allí el aislamiento social preventivo y obligatorio. Está acompañado por su mujer, Guillermina Valdes, su hijo menor Lorenzo, su hija Candelaria y su yerno Federico Giuliani, jugador de Belgrano de Paraná.

"Hace 22 años que tengo casa acá y vine a mi casa a hacer la cuarentena con mi familia. Tengo domicilio en esta ciudad desde el año 1998. Nosotros vamos a hacer la cuarentena en Esquel y voy a cumplir con mis obligaciones laborales de manera home office desde acá", explicó en su momento el conductor.

En las últimas horas, el conductor debió hacer un pedido a Buenos Aires porque en Esquel no encontraba la medicación que necesita tomar para seguir un tratamiento, al igual que su hija. Es por eso que contrató un taxi aéreo para que le acercaran su pedido y lo recibió el casero. "Yo no me moví en los 25 días que estoy acá", explicó en diálogo con Luis Novaresio en La Red.

"Nosotros lo único que hicimos es seguir un tratamiento médico. No teníamos los medicamentos, los pedimos a Buenos Aires y pagamos un taxi aéreo hasta Esquel", indicó el conductor de ShowMatch, mientras que el periodista agregó que el traslado de medicamentos es una actividad exceptuada durante la cuarentena total.

Sin querer entrar en detalles sobre sus respectivos tratamientos de salud, Tinelli aclaró que necesita un medicamento que lo buscó tres veces en Esquel y no lo consiguió. "Es algo normal. Lo tengo y no consigo la medicación acá. Y Cande continúa un tratamiento de salud que tiene hace años. Es algo privado", indicó.

"Es un traslado de medicamento a una ciudad autorizada. Puedo mostrar los papeles de la empresa del taxi aéreo en donde figura ''traslado de medicamentos para pasajeros en la ciudad de Esquel''. Nada más", continuó Tinelli y agregó que él tiene su carnet de comunicador que le permitiría solicitar el permiso para regresar a Capital Federal y continuar con sus tareas laborales desde su hogar.

"Estoy trabajando como si estuviera en el departamento de Buenos Aires. Al ser comunicador me puedo mover por todo el país. Sigo trabajando desde acá, ayudando a los curas villeros, también en la AFA, en la SuperLiga, y en mi empresa", siguió, y repitió que su programa no comenzará el 27 de abril como estaba previsto, sino que será "a mediados de mayo".

"Al confirmarse la cuarentena hasta fines de abril, hemos decidido junto a las autoridades de El Trece postergar el inicio de ShowMatch para la primera quincena de mayo. Falta muy poquito para volver a vernos", había escrito el conductor del ciclo la semana pasada en su cuenta de Twitter, red social en la que tiene más de 10 millones de seguidores.

Según pudo saber, la idea es que el show de Marcelo Tinelli coincida con la reaparición en pantalla de Separadas, la única ficción nacional que también salió de transmisión debido a que no pudieron continuar con las grabaciones por la pandemia. 

Ataque al Grupo Clarín

Marcelo Tinelli salió con los tapones de punta contra el Grupo Clarín. Cansado de una sumatoria de artículos críticos a su figura publicados en el diario Clarín, el conductor y empresario televisivo denunció que es víctima de un "hostigamiento" y de un "ataque sistemático" de parte del multimedios que lo contrata desde hace años para la realización de Showmatch. "No llego a entender el por qué de tanto hostigamiento. En 2006, cuando fue el Mundial de Alemania, me pasó lo mismo. No lo puedo creer y me parece muy injusto. No está bueno seguir mintiéndole a la gente de esa manera. ¿Clarín miente? Sí, y esta vez el título lo pongo yo", afirmó en declaraciones a radio La Red. Y disparó: "Si yo me pusiera a hablar de las denuncias que tiene el Grupo Clarín, no termino el día".

Las declaraciones de Tinelli contra el Grupo Clarín fueron consecuencia de la publicación de hoy en el diario de un artículo que da cuenta de que el conductor está siendo investigado por "hacerse llevar una valija a Esquel en un avión privado que figuró como ''vuelo humanitario''". Esa nota fue la gota que rebasó la paciencia de Tinelli, que desde Esquel -donde viajó a pasar la cuarentena junto a su familia, horas antes de que se decretara- salió a desmentir que se haya tratado de un "vuelo humanitario", sino que fue un taxi aéreo que él mismo pagó para que le llevaran medicamentos. "Que haya llegado un vuelo a Esquel con una valija con medicamentos es verdad. Eran para mí y para mi hija", admitió, pero aclarando que él fue quién contrató al vuelo, ante la imposibilidad de conseguir esos medicamentos en la ciudad patagónica.

Claro que el conductor aprovechó la aclaración para mostrar públicamente su disgusto con el Grupo Clarín. "Desde que vine a Esquel, se dicen muchas mentiras. Con mi familia jamás violamos la cuarentena. Me pareció muy raro este ataque sistemático. Desde Clarín me tratan de pelotudo desde hace años. Me atacan de manera sistemática y siempre desde el mismo medio. No entiendo por qué mienten así, no está bueno y es muy injusto", analizó. "El primero -agregó- que habló de que rompí la cuarentena fue el Grupo Clarín. Después me trataron dos veces de pelotudo. Yo no abandoné nada, además tengo libertad para moverme como periodista".

(Página 12 e Infobae)