Una competencia de aguas abiertas con gusto agridulce se desarrolló durante el pasado fin de semana en Quequén, Necochea, ya que continúa desaparecido un competidor luego de haber terminado la misma. El olavarriense Benjamín Aitala fue parte de la prueba denominada Riomar 10K y brindó su testimonio de lo que sucedió.

Un grupo de 550 personas iniciaron la competencia de aguas abiertas en Quequén, durante la tradicional Riomar 10K, pero no todos volvieron. Es que aún continúa desaparecido un nadador proveniente de Adrogué: se trata de Ezequiel Bermejo, quien partió la carrera con el número 196

Riomar es una una prueba de aguas abiertas con 37 años de trayectoria, por lo cual es ampliamente reconocida en el ambiente de los nadadores. En esta ocasión se desarrolló sobre siete kilómetros del Río Quequén y otros tres sobre el mar, un mar que no presentó las mejores condiciones para la competencia. A las cuatro horas del comienzo, se auxilió a todos los nadadores que aún se mantenían en el agua, pero nunca se pudo dar con Ezequiel Bermejo.

"Fue un final triste porque todavía hay un nadador desaparecido, todos los nadadores estamos esperando el milagro de que pueda aparecer con vida", señaló en el comienzo Benjamín Aitala, olavarriense que fue parte de Riomar 10K. "Fue una experiencia durísima, la naturaleza es tremenda cuando se pone en contra de los nadadores", agregó.

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