Evo Morales, expresidente de Bolivia, reafirmó su intención de postularse en las próximas elecciones nacionales, a pesar de lo que calificó como una “campaña mediática del gobierno” y un intento por realizar un “ilegal referéndum” con el objetivo de inhabilitarlo. En un mensaje reciente, Morales destacó que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha ratificado su habilitación para participar en los comicios, subrayando que la elección indefinida está observada por el organismo internacional, pero no la discontinua.

“A pesar de la campaña mediática del gobierno, de sus intentos por realizar un ilegal referéndum para inhabilitarme, la CIDH ha ratificado, una vez más, que estamos habilitados para participar en las próximas elecciones nacionales”, expresó Morales en su comunicado. Según él, el informe de la CIDH debería haber cerrado el caso, pero advierte que sus adversarios seguirán insistiendo en evitar su participación.

Morales comparó la situación con la que enfrentó el expresidente de Ecuador, Lenin Moreno, asegurando que, al igual que entonces, sus detractores utilizarán “argumentos falsos, mentirosos y manipuladores” para impedir su candidatura. A pesar de estos obstáculos, el exmandatario aseguró que seguirá luchando “para que la verdad y el respeto a las leyes prevalezcan, en bien de la democracia y la institucionalización del Estado”.

Este pronunciamiento de Morales ocurre en medio de un tenso clima político, donde las discusiones sobre la legalidad de su participación electoral han dividido opiniones en el país.