Tras los intensos enfrentamientos que tuvieron lugar en la región de Parotani, Cochabamba, donde se registraron heridos entre ellos un policía con una fractura expuesta, el Gobierno nacional estaría evaluando declarar un estado de excepción en el departamento, según información preliminar. Esta medida, que busca contener la situación crítica en la zona, también podría extenderse a otras regiones en caso de persistir los conflictos sociales y los bloqueos.

De confirmarse, el estado de excepción permitiría al Gobierno fortalecer la presencia policial y militar en áreas estratégicas, habilitando acciones adicionales para garantizar el orden público y la seguridad ciudadana en un contexto de tensión y enfrentamientos recurrentes en el país.

Los recientes enfrentamientos en Parotani involucraron a manifestantes y fuerzas policiales, que recurrieron al uso de gases lacrimógenos para intentar restablecer el tránsito en la zona. La Policía Boliviana reportó la retención de ambulancias y dificultades en la atención de heridos, mientras que algunos grupos de manifestantes han sido identificados portando explosivos y armas de fuego, según fuentes oficiales.

La medida del estado de excepción, de implementarse, buscará ofrecer un marco temporal de seguridad y establecer pautas claras para la restauración del tránsito y la protección de la población afectada por los conflictos.