El presidente Luis Arce condenó enérgicamente los actos de violencia registrados en el municipio de Mairana, donde efectivos policiales y periodistas resultaron agredidos mientras cumplían con sus funciones. A través de sus redes sociales, Arce expresó su solidaridad con los afectados y aseguró que estos hechos “no quedarán impunes”.

“Exigimos una investigación exhaustiva para imponer sanciones ejemplares a los autores de estos hechos inaceptables”, señaló el mandatario, enfatizando que en Bolivia “toda persona que cometa un delito debe asumir las consecuencias conforme a la ley”.

Este pronunciamiento surge en un contexto de creciente tensión social, en el cual se han registrado enfrentamientos en diferentes puntos del país. El presidente reafirmó su compromiso con la protección de los derechos de todos los bolivianos y aseguró que no se permitirá la vulneración de los mismos.