¿Cuáles son los efectos del alcohol en la conducción?

Cuando se toma alcohol, el primer efecto es negar que algo malo puede pasar: "Yo lo controlo", siente el conductor. Esa falsa seguridad hace que tolere un nivel de riesgo aumentado. Se deteriora el sentido de la responsabilidad y de la prudencia y se potencian conductas impulsivas y agresivas. Una persona bajo los efectos del alcohol percibe peor las luces, las señales, las distancias y las velocidades; puede experimentar la visión en túnel; sus ojos se fatigan con mayor facilidad, y pierde la coordinación. En ese estado se cometen muchos errores al volante y la toma de decisiones se vuelve más lenta.

Justamente este miércoles, en las primeras horas de la madrugada y tras celebrarse los Corsos oficiales, un auto fue interceptado y su conductor tenía cuatriplicado el nivel de alcohol en sangre permitido.

El auto y el conductor fueron interceptados por efectivos de policía de Tránsito de la Subsecretaria de Seguridad de nuestra cuidad, en la esquina que une las calles Guisasola y José Luis Torres. Al momento de practicarle la alcoholimetría, se constato que tenía 2.23 gramos de alcohol en sangre. Se le retuvo la licencia y el vehículo. Tomó intervención el Juez de Faltas. 

Un poco más tarde, al mediodía también personal de Tránsito de la Subsecretaria de Seguridad, en conjunto con efectivos del Comando de Patrullas local, interceptaron otro auto y a su conductor en la intersección de las avenidas Del Valle y Alberdi. 

Al practicarle la prueba de alcohol en sangre, el conductor también presentó valores mucho más elevados de los permitidos. Se estableció que se encontraba al volante con 1.16 gramos de alcohol en sangre por mililitro. También se le retuvo la licencia y el auto. Y siguió los pasos legales.