Las declaraciones de testigos presenciales de los hechos que derivaron en las graves lesiones que sufrió Juan Ignacio Agapito (18) le dieron fuerza a la hipótesis de la agresión por parte del personal de seguridad de Fomento. Con ello, la UFI Nº 7 a cargo de la investigación avanzó en el pedido de allanamiento a la vivienda y detención contra Damián Alonso, medida que se hizo efectiva la semana pasada.

EL POPULAR pudo confirmar que el imputado por "lesiones graves" declaró ante el fiscal Christian Urlézaga en la audiencia en los términos del artículo 308 del Código Procesal. Alonso dio su versión de los hechos.

El joven permanece internado en el Hospital Municipal. En la madrugada del 3 de julio sufrió una doble fractura y traumatismo de cráneo en Maipú entre Belgrano y San Martín.

Cabe recordar que tras la detención del imputado, el intendente Ezequiel Galli decretó la revocación de la habilitación del local y parte de la argumentación fue lo que se establece en la legislación que regula la actividad del personal de seguridad (ley 12.297).

El caso

En una primera instancia, los investigadores se centraron en reconstruir cómo se dieron los hechos. Para ello, fueron centrales los aportes de las imágenes de las cámaras de seguridad, tanto del sistema de Monitoreo Municipal como del propio local bailable. En ellas quedó registrada la circunstancia y el momento en que la víctima sufrió la lesión, pero no arrojaban claridad suficiente para establecer la responsabilidad del personal de seguridad.

En esa instancia se contó un único testigo presencial de los hechos que brindó su testimonio, el encargado del comercio. A ello se sumaron otras pruebas documentales, tales como la historia clínica de Agapito donde se daba cuenta de que las lesiones de mayor gravedad las sufrió en la nuca.

Se pudo saber que en los minutos previos a que el joven resulte caído y con golpes se encontraba con otras personas golpeando con patadas la persiana metálica y portón del local sobre calle Maipú. Esta era una acción reiterada por esas personas.

En un momento el joven corre hacia calle Belgrano y, desde la puerta que da a la boletería del local se abrió una de las hojas y de allí salió Alonso. El seguridad interceptó a Agapito, le cerró el paso e impidió que siguiera su rumbo. En ese punto, los elementos con lo que contaban los investigadores no eran tan claros: se estableció que con una de las manos, el ahora detenido hizo un movimiento de detención contra el joven tras lo cual Agapito cayó de espaldas. De esa forma su cabeza dio contra el cordón, y quedó caído entre un auto que estaba estacionado y la calle.

Se dejó saber a este Diario que parte de las averiguaciones consistieron en ubicar a quienes habían subido videos del hecho o de los momentos posteriores. En un primer momento, no se lograron testimonios de importancia aunque con el correr de los días se sumaron tres testigos presenciales del hecho que aportaron su versión de lo sucedido. A ellos se sumó un cuarto testigo no presencial, pero que habría aportado datos igualmente contundentes para que la UFI Nº 7 avanzara con los pedidos de allanamiento a la vivienda de Alonso en barrio Villa Floresta y su detención.

Con todo ello, el fiscal Urlézaga dio forma a la hipótesis de la responsabilidad del personal de seguridad en las "lesiones graves" -tal como se mantiene caratulada la causa- y avanzó con las medidas contra el acusado.

Actualmente, las averiguaciones continúan. EL POPULAR confirmó que se llevan adelante distintas diligencias, entre ellas sigue el análisis de las imágenes de los videos incorporados a la causa así como se aguardan los resultados de las pericias realizadas sobre distintos teléfonos secuestrados.