Ayer comenzó en los Tribunales del Departamento Judicial de Azul el juicio oral y público por el siniestro vial ocurrido en la noche del 6 de octubre del año 2017, en el que murió el olavarriense Nicolás Carballo. Son tres los conductores imputados, que llegaron a la instancia de juicio en libertad.

Cuatro años y medio después del violento choque múltiple en el cruce de la avenida Colón y España, empezó a desarrollarse el juicio en el Tribunal Oral en lo Criminal Nº 2 de Azul a través del que se resolverá la responsabilidad de tres conductores de nuestra ciudad, quienes fueron procesados por el siniestro en el murió Carballo, de 29 años.

El debate es encabezado por la jueza María Alejandra Raverta, presidenta del TOC 2 de Azul, quien es acompañada por la doctora Inés Haydeé Olmedo del Cuerpo de Magistrados Suplentes y el juez Javier Alberto Barda, titular del Juzgado de Garantías del Joven Nº 1 de Azul. En el caso del Ministerio Público Fiscal, el mismo es representado por la doctora Laura Margaretic, fiscal de la UFI Nº 9 de la vecina ciudad.

Fueron tres los vehículos que participaron en el violento siniestro vial de octubre de 2017, uno que era conducido por la víctima y los restantes iban al mando de dos de los imputados, mientras que el tercer acusado se fue del lugar donde ocurrió el choque pero no impactó contra ningún vehículo. Los conductores fueron procesados por haber provocado la muerte de Carballo mientras corrían una picada.

Específicamente en el banquillo de los acusados se ubica Lucas Álvarez, conductor del Ford Fiesta que, según la pericia accidentológica, fue el único vehículo que embistió al Renault Clío que conducía el joven fallecido. Además se encuentran Cristian Lomelino, quien iba al mando del Volkswagen Fox que colisionó únicamente contra el Fiesta, con el que corría la picada; y también Matías Maly, quien guiaba un Chevrolet Cruze que logró evitar el impacto y abandonó rápidamente la escena.

Los tres conductores llegaron a la instancia de juicio acusados por el delito de prueba ilegal de velocidad (picada) en concurso ideal con homicidio simple con dolo eventual. La investigación fue coordinada por la fiscal María Paula Serrano, titular de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 4 de Olavarría, y el planteo de la parte acusatoria es que los tres procesados que habrían participado de la picada del 6 de octubre de 2017, actuaron de forma temeraria y en este peligroso accionar provocaron la muerte de Carballo.

Respecto de la audiencia de ayer, se informó a EL POPULAR que brindaron su testimonios algunos vecinos del sector del Colón y España y otros testigos, quienes habrían confirmado que el choque ocurrió cuando Álvarez, Lomelino y Maly corrían una picada. También se escucharon las declaraciones de los peritos accidentológico y planimétrico que se desempeñaron en este episodio, y uno de los bomberos voluntarios de Olavarría que trabajó en el sector y auxilió a la víctima de 29 años.

Se espera que el debate continúe hoy, donde se escucharán los testimonios de agentes policiales que cumplieron tareas en el siniestro vial, y para mañana se programó la instancia de alegatos, donde la fiscal Margaretic y los abogados defensores de los tres procesados expondrán sus argumentos acerca de los delitos discutidos y las pruebas reproducidas en el juicio, y solicitarán el monto de pena o la absolución de los imputados a los jueces que integran el TOC 2.

Cuando pasaron más de 4 años del siniestro en el que murió Carballo, en contacto con este Diario su familia pidió que "se haga justicia, necesitamos que los culpables estén presos".

Picada mortal

El choque ocurrió pasadas las 23 del viernes 6 de octubre de 2017 cuando el Clío que conducía Carballo y se dirigía por España fue violentamente impactado por el Fiesta que iba al mando de Álvarez, que a la vez fue embestido por el Fox que conducía Lomelino. El tercer implicado no chocó y se fue del lugar. Fue tal la violencia del choque que el Renault protagonizó un trompo que despidió al conductor y el rodado quedó sobre una de las veredas. Si bien Carballo fue trasladado al Hospital Municipal "Dr. Héctor Cura", las graves heridas que había sufrido le provocaron la muerte.

Por solicitud de la Fiscalía 4, a principios de noviembre del año 2017 el Juzgado de Garantías Nº 1 ordenó la detención de Álvarez, quien permaneció en esta condición durante un mes, hasta que se resolvió su excarcelación. Desde ese momento tanto él como los otros imputados permanecieron en libertad.