Santa Noemí, Santa Ruth, San Francisco Caracciolo, San Optato de Milevi, San Petroc de Cornualles, San Gualtero de Servigliano, San Metrófano de Bizancio, Santos Nicolás y Trano, y San Quirino de Sisak.

Tb. 11,5-17; Mc. 12,35-37.

"¿Saben cuál es el poder más bello y más laudable? Es aquel que domina a sí mismo su propia soberbia". (San Antonio de Padua)