Cristina Montero y Luz Lurbe fueron las responsables de la coordinación del evento que este año tuvo la particularidad de ser virtual. Igualmente las docentes recalcaron la participación de las instituciones, los docentes y los estudiantes. Para las próximas etapas (regional y provincial) se mantendrá el mismo formato.

Se presentaron siete proyectos: dos de la EP de La Colina, uno de la Escuela Agropecuaria, uno del CEPT N° 22 y CENS N° 451.

"Son proyectos muy lindos que se desarrollaron en pandemia y teniendo en cuenta ese contexto", apuntó Montero, y detalló que algunos tienen que ver con el área de Literatura, otro de producción y tecnología, también sobre cómo impactó la pandemia en la educación y respecto a la ESI en los alumnos adultos.

"Son muy lindos trabajos. La idea era que se presentaran proyectos que se hubieran desarrollado durante este tiempo y que se visibilizara cómo se trabajó en las instituciones a pesar de la coyuntura, y está cumplido", remarcó la titular del CIIE.

A diferencia de ediciones anteriores, la Feria de Ciencias no tendrá actividad presencial. En el caso de la primera instancia, los proyectos debieron presentarse a través de un video explicativo que fue analizado por los evaluadores. Además se cambió la modalidad de evaluación, ya que antes se otorgaba puntaje y en esta oportunidad es una ficha de valoración cualitativa para mejorar las iniciativas.

"Falta la interacción social, la gente que mira y pregunta, pero cuando tuvimos que tomar la decisión de hacer la Feria era un riesgo porque no estaban permitidas las salidas educativas. La virtualidad y el modo nos permitieron ganar desde otro lado", apuntaron las profesoras.

Para suplir esa deficiencia, se desarrolló una APP similar a un museo virtual para hacer la presentación de la Feria con un resumen de los trabajos.

Virtualidad y educación

Casi dos años de pandemia de Coronavirus obligaron a las autoridades educativas a diseñar estrategias de intervención. Si bien existen programas de revinculación para los alumnos, las TICS fueron la principal herramienta para hacer frente a la dificultad. Pero no solo los estudiantes debieron utilizarlas sino también los docentes y estas les permitieron continuar capacitándose.

La responsable del CIIEE de La Madrid, Cristina Montero, contó cómo ha sido la experiencia y cuáles son los factores a favor y las contras de usar las computadoras y otros medios para seguir con la labor del organismo.

"Por ahí a los alumnos los complicó, pero en nuestro caso nos posibilitó acceder a capacitaciones constantes y acciones que antes no teníamos", sintetizó.

"A nosotros, en formación docente permanente y capacitación, la virtualidad nos favoreció porque aprendimos a trabajar de manera sincrónica. Todas las capacitaciones son virtuales y son constantes", valoró.

"Los docentes pueden intercambiar experiencias, porque hacemos capacitaciones regionales. Antes, al ser presenciales, no todos podían cursarlas; ahora el capacitador las da para los ocho distritos de la Región XXIII y se suman de distintas ciudades, eso hace que sean más interactivos y ricos", subrayó la profesora.

"Podemos intercambiar experiencias con otros profesionales y salir de lo que es lo local", repitió la responsable del CIIEE.

"La interacción no es la misma, pero en lo que es en la posibilidad de capacitación nos favoreció, porque antes el capacitador podía venir muy pocas veces y ahora tenemos constantemente", cerró Cristina Montero.