Mariano Marina abrió el juego en Chivilcoy con un pase a lo Tom Brady o el más joven -y no menos mediático- Patrick Mahomes, y "Toti" Brocal cerró la pinza del otro lado con una cómoda bandeja mientras los jugadores de Racing lo seguían de lejos.

"Los chicos me cargaban en un momento; era más para touch down que para doble" bromeó el pibe del Barrio Villa Floresta.

"Me salió. Lo vi a Toti (Brocal) y como estaba bastante lejos fue el primer recurso que me vino a la cabeza" acotó.

Primera acción para un buen cuarto inicial del pibe surgido en las formativas de Ferro Carril Sud que, como todo Estudiantes, acabó la noche con una nueva derrota frente a los chivilcoyanos en un partido siempre parejo, que tuvo su quiebre a un par de minutos para el final del tercer cuarto.

Entre el análisis del último partido por la Liga Argentina y lo que se viene en el Súper 4 transcurrió la charla con el juvenil base que, luego del infortunio de las lesiones, está teniendo minutos en una competencia de las grandes, con una camiseta grande.

"Con Racing arrancamos muy bien, con un parcial favorable y se nos escapó a lo último. En el tercer cuarto se nos arrimaron y no pudimos frenar ese envión que les terminó dando el partido" comentó Mariano.

"No sabría explicar bien que pasó en esos dos minutos. Quizás ellos siguieron con la misma intensidad de siempre, capaz que nosotros aflojamos un poco, no nos pasamos tanto la pelota, abusamos del tiro de tres puntos y les dimos la posibilidad de sacar esos contraataques. Justo a Racing, que son intensos y les gusta correr; en un abrir y cerrar de ojos hicieron la diferencia" profundizó.

En los mano a mano de los últimos tiempos el fiel de la balanza se viene inclinando para el lado de Racing de Chivilcoy.

"Son juegos peleados, que pueden ser para cualquiera. Creo que vienen en alza. No me parece que haya una razón específica, sino que se dieron así. La competencia es pareja; no tiene favoritos y eso la hace más interesante" destacó.

"La derrota duele, pero no hay que olvidar que seguimos arriba y tenemos que mantenernos sea como sea" advirtió.

En lo personal, Mariano tiene los minutos que las lesiones le sacaron la temporada anterior.

"Estoy feliz con mi momento, con el protagonismo que me da el entrenador, y con la confianza de mis compañeros y el cuerpo técnico" dijo.

Aunque esto recién empieza, ya no es el pibito que todos miraban cuando apareció con la camiseta de Ferro, y luego pasó por Racing en el TPC.

"Creo que jugar una categoría más importante me exige otras cosas en la ofensiva. Los rivales son todos muy buenos técnicamente, y creo que fundamentalmente he desarrollado el pasar la pelota, y también aumenté la cantidad de asistencias" precisó en cuanto a los cambios experimentados en su juego.

Para su desarrollo no viene nada mal un entrenador del "gremio", como el "Lobito" Fernández. "Fue base y nos pide intentar siempre un pase extra para que el compañero quede solo, y está bueno. Nos da algunos tips, algunos consejos, pero intenta estar a la par de todos, no sólo de los bases" confesó.

En Estudiantes, y para Mariano, no hay demasiado tiempo para detenerse en la bronca por la derrota en Chivilcoy: "Mañana (por este miércoles) ya nos vamos para Oberá. Debemos enfocarnos en eso; no pensar tanto en la derrota con Racing y concentrarnos en el próximo rival".

Será un primer adversario del mismo nivel, pero con otros matices. "Oberá es un equipo duro, que no conocemos porque es la Zona Norte. Es la misma competencia, pero son de conferencias totalmente distintas, con jugadores distintos" recalcó.

Siempre que se trate de Estudiantes, la exigencia es la máxima, y Mariano lo sabe: "Nosotros vamos a intentar ganar el primer partido, como siempre, y jugar la final del Súper 4".

"El objetivo es salir campeón en Oberá. Si no se puede lo veremos después, pero vamos con muchas ganas y mucho entusiasmo" cerró.