Una vez cerrado el torneo, los jugadores celebraron el título, pero también destacaron cómo lograron el campeonato tras ganar cada uno de los partidos en el certamen de Desarrollo, en zona cuenca, de la Uroba. Fue una tarde de fiesta para El Fortín.

"Salimos campeones invictos aunque nos costó muchísimo ya que fuimos el equipo que más viajó. Hicimos arriba de 2500 kilómetros, vendimos no sé cuántas empanadas para poder estar en cada uno de los encuentros. Por todo eso estamos felices".

Además, valoraron que "no se sale campeón invicto todos los días; y les ganamos bien a todos los equipos, en las dos llaves. Esto es un esfuerzo de todos, ya que la familia siempre nos bancó, al igual que la gente, por lo que estamos felices. Estamos felices en serio", cerró uno de los integrantes del equipo "fortinero" que disfruta de un gran presente.