El pasado lunes se cerró una gran campaña, incluso por encima de las expectativas creadas al comienzo de la temporada. Estudiantes batalló hasta el final en una nueva instancia de Playoffs al mejor de cinco juegos en el marco de la Liga Argentina de Básquetbol (LAB) 2021/2022 y por las semifinales de la Conferencia Sur cayó ante el equipo número uno de la fase regular: Deportivo Viedma, que ganó la serie 3 a 1.

Tras las derrotas 90-63 y 77-57 en el gimnasio "Angel Cayetano Arias" de la capital de la Provincia de Río Negro, el Bataraz logró como local el pasado sábado un muy buen triunfo 89-77 para seguir con vida en una eliminatoria en la que a priori no era favorito y el lunes perdió en casa 82-80 en la última bola.

Sin embargo, el equipo que dirige técnicamente el cordobés Cristian Colli dejó todo en la cancha hasta el último segundo y así lo entendió el público que se acercó a alentar al Albinegro, que fue despedido con una gran ovación.

Una vez finalizado el cuarto juego en el Maxigimnasio del Parque Carlos Guerrero el coach del equipo de la ciudad, con la bronca de haber quedado eliminado pero con la tranquilidad del gran trabajo realizado por todo el grupo, brindó sus impresiones sobre lo sucedido y también se refirió a lo que se puede venir:

-"La verdad es que no puedo reprocharle nada a mis jugadores, salimos a pelear el partido. En los dos juegos allá no nos sentimos cómodos, no hicimos pie. Las lesiones nos jugaron una mala pasada en esta temporada, más que nada en el caso de Jeffrey (Merchant), que es un jugador vital para nosotros. Pero nos pudimos recuperar acá, como locales, mostramos una buena cara y la peleamos hasta el final. Perder en la ultima bola no es lindo, pero nos deja la impresión que lo dejaste todo".

-"Por momentos tuvimos la sensación que lo podíamos ganar, pero ellos tuvieron un poquito más de libertad en sus jugadores determinantes. Se sabía que iba a pasar. Ellos ajustaron varios detalles que nosotros no pudimos controlar, como cuando pudieron correr. Pero así y todo perdimos en la última bola".

-"Lo que nos costó por ahí fue destrabar un poco más la zona pintada, porque no la metíamos de afuera con la fluidez del partido anterior y no teníamos ese segundito de más para tirar. Cuando pudimos hacer daño en la pintura con Cristian (Scaramuzzino), Johu (Castillo) y Jeffrey (Merchant) cuando entró, se nos abrió el juego".

-"Tengo una excelente relación con los dirigentes y hablarán entre ellos para ver cómo sigue esta historia y qué tipo de proyecto quieren armar. Obviamente que estoy abierto a escuchar cualquier tipo de propuesta porque por ser mi primera temporada todos me hicieron sentir muy a gusto acá. Ahora quiero volver a casa a estar con mi familia y ver cómo se diagrama el futuro. De mi parte siempre voy a escuchar una propuesta de Estudiantes porque me recibió con las manos abiertas y me sentí de forma excelente trabajando acá".

-"Les dije a los jugadores que se vayan con la cabeza en alto, que les estoy muy agradecido a todos. A nivel emocional fue un año muy duro para mí. Fue la primera vez que me alejé de mi familia para ir a trabajar a otro lado y gracias a ellos logré dirigir toda la temporada acá. No había muchas personas que pensaban que podíamos llegar tan lejos y perder en la última bola contra el que era el gran candidato desde el inicio y terminó primero en la fase regular".

-"Lo de Jeffrey (Merchant) es para sacarse el sombrero. Jugar desgarrado y volverte a desgarrar creo que es algo para que toda la gente reconozca el tipo de jugador que tienen, que le gusta ganar y que dejó bien en alto el nombre de Estudiantes. La verdad es que yo lo miraba y no lo podía creer. Nunca vi a alguien que esté desgarrado en la planta del pie y quiera seguir jugando con solamente nueve días de recuperación. Se lesionó en el quinto partido de la fase anterior ante Estudiantes de Concordia. Por eso lo que hizo no tiene precio".

-"Deportivo Viedma es un equipo que mete 90 puntos por partido, el que más anota en toda la Liga Argentina. Nosotros los dos partidos anteriores que tuvimos chances los dejamos en 77. Incluso el último juego en Viedma no fue malo en lo defensivo. Le bajamos el goleo a 82 en el cuarto y no les pudimos ganar. Hizo falta un poquito más, por lo que a lo mejor si los volvíamos a dejar en 77 nos llevábamos el triunfo".

-"Creo que fue el mejor rival que tuvimos y nosotros fuimos un digno rival para ellos. No nos agarró esta serie en nuestro mejor momento, ni en lo basquetbolístico ni en lo físico más que nada, que pesó más que en el juego en sí. En este último mes estuvimos acarreando un par de lesiones en el equipo y por eso les agradecí a mis jugadores porque incluso golpeados todos quisieron jugar igual".

-"Llegar a esta etapa del torneo estuvo por arriba de lo pensado, aunque yo no le quería bajar ese mensaje a los jugadores para que no se relajen. Pero eso no pasó nunca. Le jugamos al otro equipo de igual a igual e incluso les sacamos 20 puntos en el tercer juego. Creo que fue un premio al grupo que se armó y espero que se pueda retener a la mayoría del plantel y a los que no, que se cubran esos lugares de la mejor manera. Igual que al entrenador, porque si yo no sigo los dirigentes saben que armaron un equipo que hizo las cosas muy bien esta temporada y eso hay que continuarlo".