El basquetbolista argentino Juan Manuel Fernández, hijo mayor del "Lobito" Gustavo Ismael, actual director técnico de Estudiantes en la Liga Argentina de Básquetbol (LAB), expresó que junto a sus compañeros del Pallacanestro Trieste, que actúa en la Primera División de Italia, están dispuestos a resignar dinero ahora que las autoridades de la Federación local resolvieron cancelar la temporada.

"Estamos dispuestos a resignar dinero por lo que no se jugará. Nos parece una causa de fuerza mayor el tema de la pandemia", sostuvo el cordobés en relación a la expansión del coronavirus en todo el territorio italiano.

"No sabemos específicamente qué nos propondrá la dirigencia, pero ya nos contactaron avisándonos de que nos iban a bajar los salarios", resaltó el oriundo de Río Tercero, de 29 años.

La Legabasket (campeonato italiano de Primera División) se canceló el martes pasado sin resolver campeón (Virtus Bologna ostentaba la primera colocación al cabo de 20 fechas) a raíz de la imposibilidad de reanudar en lo inmediato la competencia a partir de la cuarentena obligatoria dispuesta.

"Yo tengo dos años más de contrato en Trieste. Pero es seguro que nos sentaremos a hablar para renegociar", adelantó Fernández al programa radial Reloj de 24 (AM 530).

El base cordobés advirtió que hay muchas dudas respecto de lo que ocurrirá en la temporada venidera con el máximo campeonato profesional del básquetbol peninsular. "Acá muchos clubes no saben si podrán seguir por el tema de los auspiciantes. Muchos de ellos se retirarán y se complicará continuar. Entonces no se sabe cuántos equipos participarán del próximo torneo", avisó.

"A partir del brote la economía en Italia está inmóvil, absolutamente parada. Y así es muy difícil prever lo que ocurrirá el año próximo", dijo el ex jugador de Obras Sanitarias. Fernández, que se formó en la Universidad de Temple en los Estados Unidos (la misma en la que sobresalió Juan Ignacio "Pepe" Sánchez, campeón olímpico en Atenas 2004), contó que jamás imaginó un virus tan fuerte, que provocara un colapso sanitario en el territorio italiano.

"Creo que nadie podía prever que el coronavirus iba a tomar esta dimensión. O, por lo menos, acá en Italia tanto Gobierno como público en general, al principio, se lo tomaron muy relajados", dijo el cordobés que también vistió las camisetas del Olimpia Milano, Brescia y Dinamo Sassari.

"En Trieste muchos repetían lo que dijo Donald Trump (presidente de los Estados Unidos) y tiraban que es una gripe nomás", describió. Italia es uno de los países más afectados por la pandemia mundial con casi 20.000 muertos. "Otra cuestión que complicó es el hecho de que acá no se cerraron las fronteras a tiempo. Creo que en la Argentina se actuó bien a nivel prevención", deslizó Fernández, que está acompañado por su esposa y sus dos pequeños hijos.

"Es una situación atípica a la que debimos amoldarnos. Salgo una vez por semana a hacer las compras al supermercado. Pero hay gente que la está pasando peor, como enfermeros, doctores o cajeros de tiendas o supermercados, que están haciendo un sacrificio enorme", finalizó.