-¿Se están preparando para volver pronto?

-Con exactitud no se sabe aún, no hay una versión oficial pero estamos esperando. Ojalá que sea como se está hablando, que nos entusiasma a todos un poco la vuelta al fútbol. En mi caso lo vivo con ansiedad y ganas de volver a competir.

Después se decidirá desde la parte de la salud. Empezamos a hacer entrenamientos mediante Zoom con los compañeros, eso está bueno. Por lo menos nos vemos las caras. Obviamente extraño mucho el día a día de vernos y entrenar, charlar, hacer bromas.

-Con 17 años debutaste en Primera. ¿Causó mucha sorpresa cuando te veían estudiando a esa edad?

-Me lo tomé muy tranquilo, no me volví loco ni me llamó la atención. Quizás no me lo esperaba. La familia me ayuda mucho. En un momento así uno se puede confundir. Me mantuvieron siempre con los pies sobre la tierra. Lo mismo con la gente del Club Lanús. Yo estudiaba y seguía viviendo en la pensión. Para mi, más allá de tener alguna entrevista o que la gente te empiece a conocer, iba a la escuela y era lo mismo.

Me pedían fotos y demás, pero me lo tomé bien. Estaba tranquilo y seguí haciendo la misma vida. No tuve un gran cambio en ese sentido. Eran los mismos compañeros y los amigos de toda la vida que me acompañaban.

-¿Cómo le planteaste a tus papás que a los 14 años te venías de Olavarría a jugar a Buenos Aires?

-De chiquito, jugando en Olavarría, venían los clubes a hacer pruebas. Me habían llamado de varios, yo era muy chico todavía y no lo pensaba. No era que tenía en la cabeza irme a jugar todavía, lo veía lejos. Lanús fue uno de los primeros en unos torneos que participábamos con Ferro de Olavarría. Íbamos a Coronel Suárez y ahí me empezaron a llamar.

En un momento empecé a jugar en la Liga Metropolitana, que no es AFA, en River. Era muy chiquito, jugaba acá los sábados y los domingos, viajaba y volvía. Lo hice por un año y al otro año no hice nada, estuve acá en Olavarría. Al siguiente fue cuando tuve el click en mi cabeza que me dije "es ahora o nunca".

-¿Cómo es el DT Luis Zubeldía con los más jóvenes del plantel?

-Tiene una relación especial con los más chicos. A los que son del club, cuando vienen jugadores de afuera que no jugaron en Lanús, dicen que Luis te remarca siempre el sentido de pertenencia por Lanús y el amor por la camiseta. Está más que claro que apuesta a los jóvenes, debutaron un montón en la época que él vino a Lanús y la etapa anterior también.

Tenemos una relación muy buena, siempre tratando de hablarme, de estar encima y de cuidarme mucho también. No todo en cuanto al fútbol, sino de temas de la vida en general, otros ámbitos y otras cosas con total normalidad. Hay una relación muy natural, muy buena y con todos los chicos es así.

-José Sand va a cumplir 40 años. ¿Cómo es el "Pepe" en la intimidad?

-Tengo una relación muy buena con él. Siempre como chico uno observa a los jugadores como él. "Pepe" (José Sand) y el "Laucha" (Lautaro Acosta) son los ídolos máximos del club. Tenerlos en el día a día nos sirve mucho a los más jóvenes, nos potencia y uno trata siempre de mirarlos, de sacar las cosas buenas de esos jugadores. Sand tiene casi 40 años y yo 19, vos lo ves entrenar y es una máquina. Se entrena como un chico de 17 años y eso contagia mucho. Después está demostrado en la cancha que sigue convirtiendo goles.

-¿Cómo fue tu paso y experiencia en la Selección Sub 20?

-Fue una buena experiencia. Salimos segundos y logramos la clasificación al Mundial y al Panamericano. El Mundial fue en Polonia y me llevé mucha experiencia y aprendizaje. De la parte deportiva quizás no se logró el objetivo grupal al que fuimos.

Uno siempre va con el fin de salir campeón y a ganar con esa camiseta. Todavía tengo edad de poder volver a jugar un Mundial Sub 20 y un Sudamericano. También creo que me sirvió un montón esta parte para lo que pueda llegar a venir más adelante, de eso estoy convencido. Significó representar a mi país. Todos tratan de dar lo mejor por la Selección y siempre es lindo poder hacerlo.

El debut en Primera División

-¿Qué recordás de la semana previa a debutar en Primera?

-Fue todo un poco rápido. Estaba jugando en Sexta División y recién a mitad de año (2018) me subieron a Reserva y ahí tuve una lesión. Ya había empezado el campeonato y jugaban otros chicos. Me tenia que ganar un lugar todavía. Un domingo juega la Reserva y el lunes tenían libre, entonces estaba en la pensión durmiendo porque no entrenábamos ese día.

Me fueron a despertar que necesitaban alguno de Primera para entrenar. Era el primer entrenamiento de Luis Zubeldía en el club, justo fui e hicimos fútbol. No venía entrenando mucho, estaba recuperándome. Nunca me había tocado entrenar con la Primera. Me fue bien y quedaban dos semanas para el partido con Racing. Y en la semana me llamaron para que asista otro día.

Después me llevaron una semana completa y me tocó el debut con Racing, que entré de titular y no había jugado en Reserva todavía. Eso fue un poco lo raro que no me lo imaginaba en ese momento, que se de todo tan rápido. La familia estaba con mucha felicidad, esa semana fue espectacular. Hasta último momento Luis no me había confirmado que iba a jugar, entonces me sorprendió.

Al principio fui a concentrar, que ya era un montón, sin saber si jugaba. Siempre voy a estar agradecido a Luis y al cuerpo técnico que se la jugaron por mí. Teniendo pocos entrenamientos me dieron esa chance única.