Durante la jornada del viernes, en cancha de Loma Negra, un partido de Séptima División entre el local y Embajadores fue suspendido luego de que uno de los jueces de línea del encuentro, Adrián Deber, recibiera constantes insultos por parte del padre de uno de los jugadores visitantes.

En horas de la noche, Embajadores emitó un comunicado donde se deja en claro que "desde la institución repudiamos este tipo de hechos y nos ponemos a disposición del árbitro para encontrarle solución a la problemática".

En ese sentido, aclararon que "se trata de una situación aislada", pero que de todas maneras "tomaremos cartas en el asunto para que esto no vuelva a suceder y así asegurar el bienestar de los chicos y sus pares".

"Nos disculpamos con el colegio de árbitros y quienes se encontraban en el club donde se disputó el partido disfrutando de una jornada familiar", expresaron.

Asimismo, desde la Asociación de Arbitros de Olavarría, a través de una nota firmada por su presidente Jeronimo Gallo Cabrera repudiaron los hechos acontecidos y explicaron cómo se produjo la situación: "la terna arbitral recibió insultos descalificantes y agresivos por parte de un "padre" identificado con el club visitante. Luego de pedirle que se retire del estadio y obteniendo solo negativa y más insultos por parte de esta persona, se decidió (muy acertadamente) dar por suspendido el encuentro".

También señalaron que "acompañamos a los compañeros en esta decisión y está totalmente en contra de este tipo de actos, donde los protagonistas son los chicos y su único deseo de poder divertirse con este juego".

Por último, agradecieron "el apoyo y la solidaridad de la Mesa Ejecutiva de la Liga" y reflexionaron: "todos hacemos y estamos por y para el bien del fútbol de Olavarría y tanto como jugadores, cuerpos técnicos. dirigentes y público en general merecen el respeto nuestro y de sus pares. Nosotros también lo merecemos".