Como suele suceder en estos casos, las palabras finales en el homenaje del pasado lunes fueron para el homenajeado, sin pensar que sus últimas expresiones iban a deparar todo lo que depararon.

Agustín Vernice tuvo a su cargo el cierre del acto de bienvenida que le tributó el Club Estudiantes en el frente norte del Maxi Gimnasio del Parque Carlos Guerrero.

"Esto para mí no tiene precio. Creo que de todo lo que me pasó en los últimos meses, esto es lo más lindo. Este cariño vale más que cualquier medalla" subrayó el bicampeón panamericano.

"Me siento muy afortunado. Ser espejo de los más chicos para mí es algo soñado, y lo único que les puedo transmitir es que luchen por sus sueños, que lo importante es disfrutar, que el resto viene solo" acotó.

Agustín se mostró "agradecido que esto suceda en mi club, que es mi casa, donde paso todos los días cuando estoy en Olavarría. Ser reconocido en mi club es lo mejor que me podía pasar".

"Desde 2009, que contrataron a un entrenador de primer nivel como Pablo Hoffmann, que me formó y me llevó a la selección argentina, le debo todo a Estudiantes. Espero poder darle más alegrías, y que vengan deportistas que me puedan superar" señaló.

"Soñé con esto desde el día uno. Desde mi primera competencia en un campeonato provincial hasta hoy el compromiso ha sido el mismo, y la satisfacción por hacer algo que consideraba muy difícil también. Me siento tan pleno hoy compitiendo como cuando tenía 13 años" reflexionó.

"Simplemente me gusta hacer esto. Me gusta sorprenderme de las cosas que se pueden lograr. La sensación inexplicable de dar el máximo y llegar a casa exhausto cada día, con la convicción de haber hecho las cosas lo mejor posible, supera cualquier cosa" confesó.

Las últimas palabras fueron para su sostén familiar, con un cierre que aún no hacía sospechar todo lo que estaba por anunciar un par de minutos más tarde.

"Mis padres siempre me apoyaron, siempre me motivaron. Un día mi hermano Franco me dijo ''vos vas a ser campeón del mundo'' y yo le respondí ''vos estás loco''. Ahora me dice que voy a ganar una medalla en un Juego Olímpico; espero no defraudarlo".