Alfredo Ardiles es un atleta que tiene 16 años, es hijo de Cristina Caba y José Luis Ardiles, quien aparte de ser su padre es su entrenador, su masajista, su consejero. Comenzó a correr poco después de haber aprendido a caminar, y nunca se detuvo. A la vez que crece le suma más entrenamiento en pro de los objetivos, de las metas que se ha propuesto. Siendo aún menor de edad, este mes logró bajar un récord olavarriense en 800 metros que ostentaba desde hace 32 años, otro grande del atletismo local, como lo es Juan Suárez. Hoy en día cuesta encontrar jóvenes que ya tengan objetivos o desafíos por delante tan claros como los que tiene Alfredo. El Popular Medios dialogó con Alfredo Ardiles, quien con mucha tranquilidad fue narrando lo que significa el atletismo en su vida.

Con voz tranquila y segura, Alfredo comenzó diciendo que "empecé con el atletismo a los tres años recién cumplidos, empecé con carreritas de pistas que corría de corta distancia. Después, más adelante me gustaban las carreras más larguitas, así que ya con 4 años ya competía en la milla, por ejemplo, que eran carreras más largas. La milla son 1.600 metros".

Luego Alfredo narró de qué manera fue toamando más desafíos: "iba subiendo de distancias, iba pasando por muchas carreras. Llegando a los 8 años empecé a correr las carreras Cartoon Network que las gané cinco veces consecutivas. Por suerte no me sacaron el invicto. También competí en un sólo provincial con 12 años, creo. Ya después empezamos con carreras un poco más largas, como de 10 kilómetros, de 11 kilómetros", cuenta Alfredo, con total naturalidad. Las carreras de Cartoon Network, se corrieron en el Hipódromo de San Isidro de Buenos Aires con la participación de más de 10.000 competidores en sus distintas categorías. En las cinco que compitió se trajo el galardón máximo.

Los logros sólo se alcanzan con esfuerzo y dedicación. "A mí nunca me disgustó entrenar. Directamente nunca me ha pasado que no tengo ganas de entrenar. Yo salgo a entrenar y no tengo problemas, tengo ganas. Total tengo bastante objetivos y me falta bastante. También tengo mucha constancia y soy muy cuidadoso con las horas de sueño. Yo siempre las cuento", dijo Alfredo Ardiles, demostrando plena conciencia de cuáles son sus objetivos. 

Aparte de tener una conducta y una disciplina en el deporte, Alfredo va a la escuela como cualquier otro adolescente de su edad. Y la escuela también se encuentra dentro de sus proyectos de vida: "estoy estudiando en la secundaria Número 10. Estoy desde el primario ahí. No he tenido problemas con las materias. Nunca me he llevado una materia. Voy bien", cuenta con orgullo, haciendo hincapié en que se puede estudiar y entrenar a la vez, expresando que "Yo creo que sí, si le metés pilas obvio que se puede entrenar y estudiar a la vez. Tenés tiempo, sólo hay que saber organizarse", dijo con la seguridad de un atleta experimentado.

Un récord en 800 metros y el vínculo con su padre y entrenador

Alfredo sostiene que "este logro creo que es uno de los mayores que logré durante toda mi carrera de atletismo. Me siento muy orgulloso de mí mismo. Porque es un logro bajar un record de 32 años y no me lo esperaba tan cercano, a mi edad. La verdad que estoy muy contento. Fue en Mar del Plata en la pista de Justo Román", enfatizó Ardiles, quien puso su nombre entre los atletas más importantes en la historia de la ciudad: "me puso muy contento eso, poder hacerme lugar entre los grandes, como mi viejo, para hacer más grande el apellido". 

Alfredo, tiene a su entrenador en su casa. Consultado sobre esa particularidad, dijo que "y es como estar controladito, pero yo siempre me cuido en las comidas y eso, pero imaginate que yo nunca he faltado a ningún entrenamiento, porque siempre voy con él, entonces soy constante, como siempre dije. Y aprendo una banda de él, ese compromiso".

José Luis Ardiles, el orgullo de un padre que ama la disciplina

José Luis dijo "estoy muy contento, muy contento. Siempre hemos trabajado de la misma manera con todos los atletas que he tenido. Porque siempre van surgiendo chicos, porque entran chicos nuevos y trabajan con mi hijo, es un atleta más. Desde que nos calzamos la zapatilla y la remera, es un atleta. Ya ahí pasa a hacer el entrenamiento como todos y hoy me siento orgulloso, por lo que hemos logrado con mucho trabajo, dando todo lo mejor y exigiendo todo lo que más se pueda, a su etapa. Porque ellos tienen una etapa, él (Alfredo) tiene recién 16 años y nos ha traído una gran alegría, para mí y todo el grupo de los correcaminos, estoy muy contento. Aunque hay que recalcar que en la carrera de Malvinas, le avisaron que había hecho un récord de ese circuito en los 3 Km, así que es por doblete esta semana que hemos tenido ese logro. Así que hay que seguir entrenando".

Con respecto al logro, José Luis Ardiles dijo que "la marca de Juan Suárez estaba en los 2 minutos en los 800 metros, desde hace 32 años está vigente esa marca. Alfredo logró hacer esa distancia en 1? 59?? 90, esa es la marca oficial que le ponen. Por ahí en el video nosotros registramos medio segundo menos, pero esa es la marca que le registran logrando batir el record que se mantuvo durante tantos años". 

Sí, él tiene su control, hay que controlarlo como todo chico. A veces estamos juntos haciendo algo y le digo bueno, listo, es la hora, hay que dormir porque siempre el entrenamiento que nos toca es un poco exigente digamos para lo que ellos pueden hacer. Y después el resto de los chicos, hay que ayudarlos. Ahora hay un ejemplo más que todo se puede, que todo se logra, estudiando y entrenando. Se puede, todavía hay más tiempo todavía. Así que como esto recién empieza, por ahí los del mismo grupo van a tomar conciencia que siempre se puede. Es la mente mía que yo siempre le digo a todos los chicos, los atletas, tanto mujeres como varones, que podemos, si le dedicamos, podemos". 

Entre todos los atletas que entrena, está su hijo, pero como entrenador sabe hasta dónde exigirle a un atleta. "Sí, siempre tengo esa norma de saber hasta dónde puede ir uno y a medida que van entrenando ellos, uno sabe qué es lo les puede exigir. Por eso la ventaja que por ahí tiene él, es el hecho de decir que como soy masajista de varios deportistas que vienen acá, lo soy de él también. Así que después de cada entrenamiento fuerte , él pasa por la sala de masajes. Éso es muy importante, hoy en día es lo que más se fomenta en el deporte y más en el atletismo, es estar bien muscularmente".

Alfredo, aún no sabe cuál es su techo en esta disciplina deportiva, porque tiene mucho aún por delante. Aún hoy acompaña a su padre en las carreras de montaña. Este año correrá nuevamente en Villa La Angostura en donde pusieron una categoría para chicos hasta 19 años, que es "muy importante", según señala José Luis. Porque antes corrían de 15 a 29 años y era imposible lograr un buen resultado. Pero de todas maneras no hay que saltear etapas. Como dice José Luis, "recién empieza él y no nos tenemos que entusiasmar quizás, sino continuar con las mismas distancias que ellos necesitan ahora, que es pasar por los 800, 1.500, 3.000, avanzar cada tanto a 5.000. Él ya se descubrió en algunas carreritas largas que hizo, para ver hasta dónde va, qué gusto le va dando, así él está más entusiasmado". 

Si bien Alfredo es su hijo, para José Luis, los cuidados son para todos por igual. "Sí, de todas formas es muy importante, porque yo les hablo a todos por igual, tanto a la gente grande, los chicos, todos en lo que es correr, mucho cuidado. Controlarse, él tiene su control como todos los chicos. Haciéndose un estudio, una análisis de sangre, un electrocardiograma, siempre es bueno tener una información especializada que son lo que le dice a uno si puede seguir avanzando. Alfredo está entrenando ahora casi todos los días de la semana. Antes entrenaba lunes, miércoles y viernes. Ahora pasó a cinco días a la semana y se logró ajustar esos entrenamientos y que él los pueda aguantar y me va dando resultados. 

La escuela, los entrenamientos y los amigos

"Sí, tengo dos grandes amigos en el atletismo", dijo Alfredo y continuó diciendo que "son grandes amigos que me acompañan porque les gusta el mismo deporte que yo y está bueno tener el acompañamiento también. Tengo compañeros que van al ritmo mío al entrenamiento, van conmigo al gimnasio. Es muy lindo esto de tener la virtud de tener buenas personas cerca". 

Y como todo adolescente, a veces le llega una invitación para jugar al fútbol, pero Alfredo responde que "no, la verdad que prefiero quedarme en casa, no por mala onda sino porque no soy tan bueno jugando. Pero igual le puedo meter mecha, pero normalmente si juego fútbol es en educación física en la escuela, porque otras veces dicen en el grupo, ?vamos a jugar un fútbol cinco? y yo ni siquiera doy bola, no voy a dar bola nunca yo, no, no. Me llego a doblar un tobillo, es una macana". 

José Luis Ardiles, los agradecimientos y un pedido

El entrenador y padre de Alfredo agregó que "quiero agradecer y decirles a muchos chicos que pueden juntarse más, que cuando haya más chicos para correr es más lindo. Él (Alfredo), está representando a los Corre Caminos porque es mi grupo, y está federado en El Fortín. También quiero destacar que este año trabajó con un preparador físico también, que es Horacio Baez, quien tiene mucho conocimiento, fue el entrenador de Osvaldo Suárez, y está muy contento también". 

Como todo deportista que se destaca, sea cual sea la disciplina deportiva, necesita del acompañamiento necesario para poder seguir avanzando en su formación profesional. Todo requiere de mucho esfuerzo y no es barato incursionar en ese proceso. Hay que pagar viajes, estadías, indumentaria, inscripciones, etc. Sería bueno que el Estado acompañe a aquellos deportistas en formación que han demostrado con creces su enorme compromiso asumido en pos de los objetivos fijados. Son muchas las cualidades que juntas hacen la diferencia: compromiso, esfuerzo, constancia, perseverancia, responsabilidad, solidaridad y muchas más. Cuando esto se hace visible en lo logros alcanzados, sería justicia que desde el Estado o desde el sector privado, se acompañe a quien reúne esas cualidades. Porque no se ayuda a una única persona sino a muchos que se verán incentivados a seguir ese camino, porque es el que lleva a la excelencia, al éxito. José Luis Ardiles es consciente de ello, y siempre ha reclamado lo mismo.

Hoy tiene a su hijo en esta situación a la que llegó no sin esfuerzo. Por eso señala que "ojalá que este año seamos reconocidos porque la otra vez estuvimos llenando la ficha para las becas deportivas, ojalá que de tantos años de lucha, este año se nos de, y si no, seguiremos luchando como siempre y seguiremos esperando. Una beca entusiasma al atleta, entusiasma al grupo y si no se nos da, como lo he conversado con él, tenemos que seguir porque él igual de todas formas representa a un buen grupo que desde el primero hasta el último, sabe del movimiento nuestro, de lo seguro que marchamos. Nunca es tarde, pero a veces hay que llegar a los logros, con todas las medallas colgadas, para llegar a que te reconozcan, pero bueno, seguiremos luchando". Ojalá porque desde el Estado o desde el sector privado, alguien se movilice y acompañe a una promesa deportiva que a pesar de su corta edad, tiene varios premios en su haber.

Un proyecto, una meta, un sueño

"Y un gran sueño que tengo yo es competir en un juego olímpico, es un sueño que tengo a futuro. Es un gran sueño, el mayor que tengo yo, superarme cada día y representar a la Argentina, sería tremendo", expresó al finalizar la entrevista Alfredo Ardiles. Que así sea.