El pueblo argentino le brindó a Diego Maradona un conmovedor homenaje a la altura de los recibidos por los más importantes próceres de la Patria durante un masivo velatorio que quedó inconcluso por los incidentes registrados en horas de la tarde dentro y fuera de la Casa Rosada.

Como previa de ese acto de afirmación para la memoria colectiva, sus familiares más directos, amigos y allegados le dieron el último adiós a cajón abierto en una ceremonia fúnebre íntima.

El Estado nacional rindió todos los honores para el astro argentino campeón del mundo. El presidente Alberto Fernández fue el encargado de colocar sobre su féretro una camiseta de Argentinos Juniors, club de sus amores y primer escudo defendido por el astro en su trayectoria de leyenda.

La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner visitó el lugar por la tarde, dialogó con la familia y le ofrendó al Diez una camiseta de Gimnasia y Esgrima La Plata que depositó sobre el cajón.