River Plate es el campeón de campeones
Tanto Marcelo Gallardo como Eduardo Domínguez apostaron a construir superioridad desde el mediocampo. En ese marco, Colón logró su primer objetivo: impedir el funcionamiento colectivo de River, interrumpir su movilidad y circuito creativo. El Sabalero, así, se acercó dos veces, ambas por la derecha, una con Meza y la otra con el propio Farías. Una vez Martínez y la otra Paulo Díaz se cruzaron para salvar su arco.
Pero luego de la primera media hora el equipo de Gallardo empezó a encontrar algunos espacios y les sacó provecho. Simón se fue por derecha y envió un centro exacto para el ingreso de Julián Alvarez, que se estiró para definir ante cierto estatismo de Burián y puso el 1 a 0.
El segundo tiempo comenzó al revés que el primero: fue River el mejor parado y llegó dos veces con chances de gol en los cinco minutos iniciales, ambas con Simón, que definió mal. El equipo de Gallardo lo liquidó a los 13’: salió mal la defensa sabalera, José Paradela se metió al área por derecha, envió el centro y otra vez Julián Alvarez batió en dos tiempos a Burián para el 2 a 0. Colón ya no tuvo ideas ni piernas para revertir la historia. Y para que la fiesta de River fuera completa, Gallardo le dio ingreso al histórico capitán Leonardo Ponzio para que se despidiera dentro del campo y encabezara su última vuelta olímpica; Rollheiser amplió el triunfo con su primer gol en Primera; y Carrascal se dio un pequeño baño de confianza sellando la goleada.