"La opinión de la FCD se apoya en evidencia científica y con la urgencia necesaria", indica un comunicado de la Fundación.

La investigación científica ha estado impulsada por la propia Fundación, y en ella han participado el Williams College de Estados Unidos, Mystic Seaport, y el Centro Smithsoniano de Investigaciones Ambientales (SERC por sus siglas en inglés).

Los resultados del informe indican que se han identificado 53 especies no nativas en el ecosistema marino de las islas, por las cinco que se conocían hasta la fecha.

Entre las especies descubiertas que no pertenecían al ecosistema de Galápagos, se encuentran una especie de moluscos que se llaman bromas, varias especies de tunicados como las ascidias, gusanos marinos y briozoos.

Según los investigadores, "este incremento en las especies invasoras es un descubrimiento asombroso, sobre todo porque solo una pequeña fracción de las Galápagos ha sido analizada en este estudio inicial".

La FCD llama la atención sobre que "el número y el potencial impacto de especies marinas no nativas en aguas tropicales alrededor del mundo, ha sido significativamente desestimado".

Biodiversidad del archipiélago

En un documento titulado "Alerta sobre el estado de conservación del capital natural de Galápagos" expresa la posición institucional de la Fundación respecto a la situación actual de la biodiversidad más representativa del archipiélago.

"La alerta destaca la situación frágil del capital natural de Galápagos y las amenazas que existen para la conservación de sus únicos ecosistemas", advirtió la Fundación.

En el documento también se invita a reflexionar sobre el concepto de lo "sostenible" y del "desarrollo" para la zona ya que ese modelo de desarrollo sostenible que se impulsa en el archipiélago "ha sido el formato promovido por el discurso político, económico y de conservación".

El archipiélago de Galápagos, a mil kilómetros de las costas continentales de Ecuador, fue declarado Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco en 1978, y debe su nombre a las grandes tortugas que lo habitan.

Su reserva terrestre y marina, que abarca una superficie de 138.000 kilómetros cuadrados, contiene una rica biodiversidad, considerada como un laboratorio natural que permitió al científico británico Charles Darwin desarrollar su teoría sobre la evolución y selección natural de las especies.

La FCD es una organización sin ánimo de lucro que desde hace sesenta años trabaja para generar ciencia y conocimiento sobre Galápagos, llevando a cabo acciones para conservar su patrimonio natural.

Igualmente, opera la Estación Científica Charles Darwin ECCD, radicada en la localidad de Puerto Ayorá, en la isla Santa Cruz.

EFEverde