Este sábado por la noche, la Mutual de Arte Popular Murga Arrebatando Lágrimas realizará la 12ª edición de su tradicional Carnaval de Locura.

El espectáculo dará inicio a las 20.30 en el sector de Rufino Fal y Chiclana, en barrio Hipólito Yrigoyen, y en su transcurso actuarán Sambos Caporales, Campero Campero junto al ballet de folklore Origen Criollo, y la murga Arrebatando Lágrimas con la participación especial de Erica Labelle, mientras que el cierre será con un baile popular a cargo de Los Kumbieros.

La conducción del evento estará a cargo de Luis Donatelli y Mechongué, que también realizará intervenciones con sus personajes, mientras que el sonido y la iluminación serán responsabilidad de soundcheck. Habrá servicio de cantina con precios populares y se realizarán sorteos.

Desde la Mutual de Arte Popular Murga Arrebatando Lágrimas se ha invitado a participar a toda la comunidad "del carnaval diverso, gratuito y popular que compartirá con las agrupaciones y artistas presentes en la noche del sábado donde se presentará el nuevo espectáculo ''La Pacha, bandera de amor y transformación'' ".

Para este carnaval 2020, desde la murga se plantea "una idea de relato estético que se titula "La Pacha, bandera de amor y transformación", aludiendo a la necesidad de revalorizar y defender los recursos naturales que posee Latinoamérica asechados por "El Poder" como fiera; por ello todos los murgueros llevan en su cabeza galeras blancas valor simbólico que destaca el tiempo en la bandera Whipala y el mapa de América Latina invertida aludiendo a la frase ''El Sur es el Norte'', intervenida artísticamente por cada murguero".

Escénicamente, desde la murga indican que en el espectáculo "se desarrolla un guión artístico que llevan adelante a personajes caracterizando a ''La revolución'' como transformadora de pensamiento, acción y construcción social colectiva, ''El poder económico, geopolítico y el empoderamiento'' y ''La Pachamama del Amor'', que reivindican y buscan la toma de conciencia sobre nuestro planeta y en especial los recursos naturales de América Latina".

La historia de Arrebatando Lágrimas

La Murga Arrebatando Lágrimas es una agrupación carnavalera de 20 años de existencia, que se formó en el año 1999 y está integrada actualmente por un cuerpo de percusión, un cuerpo de bailarines, mascotas, actores que interpretan personajes, coro y colaboradores. También cuenta con elementos de fantasía como muñecos, estandartes, pancartas, banderas, sombrillas.

Arrebatando Lágrimas tuvo su primera presentación el 12 de diciembre de 1999 en el marco de la muestra de cuadros callejeros "Pedazos", que formó parte de la exposición "Resignificaciones públicas". El rojo, amarillo, azul y verde fueron elegidos para colorear la ciudad del cemento y son distintivos, y su logo del ojo entre dos manos, en alusión a su nombre que arrebata las penas de la gente.

Desde ese momento su intención fue recuperar la fiesta del Carnaval, volcando en sus presentaciones homenajes a otras épocas sin descuidar la actualidad, organizando espectáculos carnavaleros en distintos barrios de la ciudad posicionándose como los hacedores de la vuelta del carnaval a Olavarría desde 1999 hasta nuestros días.

Arrebatando Lágrimas guarda en su espíritu "las ganas de arrebatar los dolores de la gente de esta ciudad". Desde su formación se dedicó a cantar y utilizar los más variados instrumentos con el padrinazgo del bombo con platillo, instrumento característico de la estética murguera.

Esta murga varía en las organizaciones comunes de cualquier murga, ya que se forma entendiendo que la murga se hace en grupo y con el pueblo. Se maneja de manera colectiva, no hay director, sino que el grupo decide sobre el accionar de la misma, ejerciendo el pluralismo y la democracia en cada decisión. Su punto de partida fue la Plaza Aguado, desde 2011 se encuentra trabajando hacia el interior del barrio Hipólito Yrigoyen, donde en un futuro próximo se comenzara a construir "Casa Murga.

Desde hace años, la murga fomenta el crecimiento de su lenguaje en la comunidad, realizando talleres en los que transmite los conocimientos adquiridos, en diversas instituciones y localidades dentro de la provincia y el barrio. También colabora con el compromiso social y enarbola el sentido del trabajo con la "memoria".