En una conferencia de prensa el viernes pasado, el vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció medidas significativas adoptadas por el Gobierno en busca de poner fin a los privilegios políticos y reducir los gastos gubernamentales en medio de la hiperinflación que atraviesa la Argentina.

Adorni confirmó la decisión de vender dos aviones pertenecientes a YPF, los cuales, según él, eran utilizados casi exclusivamente por figuras políticas. Esta acción forma parte de un conjunto de medidas que incluyen la reducción del 50% en la cantidad de choferes en la administración pública nacional y la disminución de la flota de autos oficiales.

El vocero destacó que estas medidas buscan recortar más de US$3000 millones anuales en gastos de funcionamiento, subrayando la necesidad de poner fin a los privilegios que, según él, han caracterizado a la política en términos de choferes y uso de aviones.

Paralelamente, la cuenta de Twitter del grupo aeronáutico @Modo_S_ había estado denunciando la situación desde 2011, evidenciando el uso de aviones de YPF para viajes políticos. Se reveló que uno de estos viajes tuvo un costo de $199.299 más USD$ 6250, además de tasas y cargos por USD$ 2841 a favor de YPF S.A.

Adorni también abordó la situación económica, declarando que la Argentina está experimentando una hiperinflación, con una tasa del 3678% anual. En este contexto, el Gobierno busca ajustar gastos de funcionamiento, implicando recortes drásticos en la flota de autos oficiales, la planta de choferes de funcionarios, y la congelación de planes sociales con intermediarios.

En cuanto al impacto de la devaluación y el plan económico del ministro Luis Caputo en los salarios, Adorni afirmó que el Gobierno ha hecho todo lo posible para minimizar el impacto y destacó la intención de terminar con el "negocio de la pobreza".