LUIS RUBIALES  renunció como presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), cargo que ocupaba desde 2018 y del que había sido suspendido por FIFA durante 90 días.

El ahora ex mandatario anunció su salida a través de una entrevista y una carta en sus redes sociales en las que comunicó la noticia y explicó el motivo de su decisión:

“Tras la veloz suspensión realizada por FIFA, más el resto de procedimientos abiertos contra mipersona, es evidente que no podré volver a mi cargo. Insistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir a nada positivo, ni a la Federación ni al fútbol español. Entre otras cosas, porque hay poderes fácticos que impedirán mi vuelta”.

Rubiales tomó la decisión luego de la creciente presión pública que caía sobre su figura a partir del polémico beso a la futbolista Jennifer Hermoso y a sus cuestionadas actitudes durante y después de la celebración del título de la Selección de su país en el Mundial femenino.

Su renuncia se hizo esperar varias semanas, ya que el dirigente se había resistido a dar un paso al lado pese a que se lo habían pedido incluso desde el Gobierno español.

No quiero que el fútbol español pueda resultar perjudicado por toda esta campaña tan desproporcionada. Tomo esta decisión tras haberme asegurado de que mi marcha contribuirá a la estabilidad que va a permitir que tanto Europa como África sigan unidas en el sueño de 2030", señaló en referencia a la candidatura del Mundial 2030 e insistió una vez más sobre su inocencia.