Entrevista a Carolina Amitrano: "Intervenimos cuando hay un derecho vulnerado"
La responsable del Servicio local contó cómo es el trabajo que realiza el área. La importancia de la interrelación con otras instituciones.
La licenciada en Psicopedagogía Carolina Amitrano es la responsable del Servicio Local de Promoción y Protección de los Derechos del Niño, la Niña y el Adolescente de General La Madrid. La profesional explicó cuál es el rol que cumple el organismo que tiene su sede en Sixto Rodríguez Nº 852.
"El Servicio Local es un organismo provincial cuya función principal es la promoción y protección de los derechos de niños, niñas y adolescentes. Nuestra intervención se basa en estar presentes en cualquier situación en la que se evalúe, informe o denuncie que hay un derecho de la infancia vulnerado; si hay un riesgo, una problemática o una situación irregular, cualquier persona lo puede informar y nuestra obligación es actuar", detalló la funcionaria.
"Trabajamos más con el emergente, con lo que va surgiendo, y queda más pendiente la prevención y la promoción que este año es un objetivo cumplir", comentó Amitrano.
Por eso "la idea es tener más presencia en el antes de que se instalen las problemáticas o que las situaciones sean para intervenir", señaló, y comentó que el Servicio está conformado por un equipo de abogados, psicóloga, trabajadores sociales y una operadora comunitaria.
"No sólo intervenimos en casos judicializados. Citamos a las familias, nos entrevistamos con los niños y las niñas, vamos a las escuelas, interactuamos con los profesionales", reveló.
"Es fundamental la articulación del Servicio con otras instituciones. Hasta ahora estábamos más aislados y ahora estamos tratando de hacerlo más en red", señaló la especialista, y en esa línea destacó el rol de la educación. "La escuela es clave y trabajan muy bien. La ESI ha abierto un mundo en el momento de hablar; es fundamental en la forma en la que cuentan los niños las cosas", ponderó.
"Una de nuestras funciones es mantener unidas a las familias en tanto y en cuanto sea un entorno saludable; trabajamos en la medida de revinculación, en el caso de las medidas de abrigo porque queremos que estén en su casa y no institucionalizados. Nosotros hacemos un informe de adopción de una medida y el Juzgado es el que avala y ejecuta", señaló.
"Nosotros tenemos que escuchar. La palabra del niño tiene mucho peso y nosotros tenemos la responsabilidad de evaluar y tomar decisiones", aclaró.
"Lo delicado de nuestro trabajo es que nos metemos en el centro de la familia, en su intimidad. Hay que encontrar el equilibrio, para romper los patrones, para demostrarle que hay otra cosa y que no es normal ni esperable las situaciones que viven", concluyó Carolina Amitrano.