La Corte Suprema de Arizona ha emitido un fallo trascendental este martes, permitiendo la aplicación de una ley antiaborto que data del año 1864. Esta normativa, que castiga el aborto con penas de prisión de dos a cinco años, excepto en casos donde la vida de la madre esté en riesgo, ha revivido el debate sobre el derecho reproductivo en el estado.

La legislación, redactada antes de que Arizona se convirtiera en un estado de EE.UU., prohíbe la interrupción del embarazo incluso en situaciones de violación o incesto, sin tomar en cuenta posibles complicaciones médicas. La decisión de la Corte Suprema ha generado controversia, especialmente debido a la presión de políticos, expertos y activistas que argumentan que la ley había sido efectivamente anulada por décadas de legislación estatal más reciente, incluida una ley de 2022 que permitía el aborto hasta las 15 semanas de gestación.

El fallo judicial ha provocado reacciones a nivel estatal y federal. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha expresado su enérgico rechazo desde Washington, calificando la decisión como un intento de arrebatar la libertad de las mujeres. Por su parte, la gobernadora de Arizona, Katie Hobbs, ha lamentado la medida, considerándola un golpe a los derechos básicos de las mujeres en el estado.

Asimismo, la fiscal general de Arizona, Kris Mayes, ha criticado el fallo, calificándolo como desmedido y una afrenta a la libertad. Mayes ha anunciado que mientras esté en su cargo no procesará a ningún médico o mujer bajo la "ley draconiana" impuesta por la Corte Suprema.

Este acontecimiento se enmarca en un contexto nacional marcado por el caos generado tras la derogación en 2022 de Roe contra Wade, el emblemático fallo de 1973 que legalizaba el aborto en todo el país. La decisión de la Corte Suprema de Arizona también coincide con un esfuerzo por parte de diversos grupos para que en las elecciones de noviembre se consulte a los ciudadanos del estado sobre la inclusión del derecho al aborto en la Constitución estatal, lo que añade un nuevo capítulo al debate sobre el derecho reproductivo en Arizona.