Helado para perros: recetas para hacerlos en casa y ser felices
Las altas temperaturas no sólo afectan a los seres humanos. También los perros, especialmente los de abundante pelo, sufren los efectos del calor, por lo que es importante tomar medidas para protegerlos. Debemos estar muy atentos a su hidratación y a los síntomas de fatiga si queremos evitar los peligrosos golpes de calor.
Quizá nunca te lo hayas planteado, pero a tu mascota también puede gustarle tomar algo fresquito cuando el termómetro supera los 30 grados. Los helados caseros para perros son una buena opción si querés refrescar a tu peludo. Por eso, en este artículo te comparto algo de lo que descubrí, después de probar qué frutas les gustan.
¿Los perros pueden comer helado?
Efectivamente, los perros sí pueden tomar helados, aunque esto no quiere decir que le des del tuyo. Como norma general y por precaución, no le des helado para personas, porque puede tener ingredientes que le hagan mal o que, incluso, resulten tóxicos.
Algunos de los ingredientes más habituales en helados 'humanos', como puede ser el cacao y sus derivados (chocolate), son dañinos para la salud de los canes y, en cantidades elevadas, podrían causarle la muerte. También es importante evitar la lactosa (leche), porque, a medida que un perro crece, su capacidad para digerirla disminuye.
Es fundamental evitar el ingrediente más común en los helados para personas: el azúcar u otros edulcorantes. Un exceso de azúcares podría causar a nuestro perro trastornos digestivos o endocrinos, además de perjudicar sus dientes.
Qué helado se le puede dar a un perro
Dado que los perros no pueden comer muchos de los ingredientes típicos de nuestros helados, debemos sustituirlos por alimentos que sí pueden comer. Existen numerosas opciones para preparar helados caseros para nuestros mejores amigos, que pueden incluir ingredientes como:
Frutas: manzana, sandía, pera o banana que son frutas aptas para perros y les aportan vitaminas y minerales, al mismo tiempo que los hidratan. También hay muchas frutas que no deben comer los perros, atenti con eso.
Carnes desmenuzadas: los perros son animales carnívoros, por lo que no hay nada mejor para ellos que una golosina refrescante preparada con carne.
Verduras: la zanahoria, las arvejas o la calabaza son ingredientes muy utilizados en los helados caninos. Sin embargo, también hay muchas verduras que no deben comer los perros y que, por tanto, debes evitar.
Si no estás muy seguro/a de qué alimentos podes incluir al hacer un helado para perros, siempre siempre consultar a tu vete de confianza.
Helado cremoso de banana
Para hacer este helado tan solo necesitas media banana maduro y un yogur natural sin azúcar ni lactosa.
Y seguí estos pasos: mezcla los ingredientes en el vaso de la batidora, o la minipimmer. Pone la mezcla en un recipiente o en el propio envase del yogur, y metelo en el congelador por 3-4 horas.
Helado de pollo
Aunque a nosotros nos suene extraño, seguro que a tu mascota le parecerá una delicia. Más que una golosina, este helado es casi una comida completa y resulta perfecto para ofrecérselo en los días en que las altas temperaturas pueden hacer que pierda el apetito.
Para hacer este helado casero tenes que conseguir: un bife de pechuga de pollo, agua y una zanahoria, si queres. Después:
Cocina el pollo junto la zanahorias, en abundante agua. No le agregues sal ni pimienta. Retira el caldo del fuego y deja que se enfríe. Saca y desmenuza la pechuga y pone los trocitos en el vaso de la batidora. Agrega unas cucharadas de caldo y, unos pedazos de la zanahoria. Batilo, ponelo en un recipiente para frío, y llevalo al congelador hasta que el futuro helado perruno se solidifique.
Consejos
Los perros pueden tomar helados, pero esta golosina no puede sustituir a sus comidas habituales. No conviene abusar y hay que dárselos siempre con moderación (de vez en cuando y en cantidades pequeñas). Y fundamental, nunca obligues a tu perro a comer algo que no quiere.
Si tu helado es tipo polo (cubitos de hielo), no se lo des nunca directamente del congelador, porque al lamerlo podría quedarse pegado a su lengua y herirlo. Sácalo del congelador unos minutos antes y pasalo por abajo del chorro de agua de la canilla.