Rusia lanzó un misil balístico intercontinental contra Ucrania por primera vez, según el ejército ucraniano, marcando una escalada tras el uso de misiles de largo alcance por Kiev. El ataque, entre las 5:00 y 7:00 a. m. en Dnipro, incluyó un misil Kinzhal y siete misiles de crucero, de los cuales seis fueron interceptados. El misil, identificado como un RS-26 Rubezh, no llevaba ojiva nuclear. Dañó instalaciones industriales, pero no se reportaron víctimas. Moscú rechazó comentar, mientras su portavoz calificó los ataques ucranianos con misiles occidentales como una "nueva escalada"