Al menos 11 personas han perdido la vida y 12 continúan desaparecidas luego de la erupción del volcán Marapi, en el oeste de Indonesia. Según los servicios de emergencia, tres senderistas fueron encontrados con vida tras una intensa búsqueda. En el momento de la erupción, el domingo, había 75 senderistas, de los cuales 26 no pudieron ser evacuados a tiempo, explicó Abdul Malik, jefe de la Agencia de Búsqueda y Rescate de Padang. "Hemos encontrado a 14 personas, tres fueron halladas con vida y 11 fueron encontradas muertas", agregó Malik. 

Los equipos de rescate trabajaron durante toda la noche para ayudar a los senderistas, indicó la agencia de conservación ambiental de Sumatra Occidental. El monte Marapi, de 2.891 metros de altitud, lanzó una columna de cenizas de tres kilómetros de altura el domingo a las 14.54. La erupción, que aún continúa, ha impedido las evacuaciones en helicóptero, según Malik. "Hasta esta mañana, seguía saliendo humo de la cumbre", añadió. La ceniza expulsada por el monte Marapi se elevó hasta 3.000 metros por encima de la cima, según declaró el jefe del Centro Indonesio de Vulcanología y Riesgos Geológicos. Rudy Rinaldi, jefe de la Oficina de Mitigación de Desastres de Sumatra Occidental, informó que algunos de los senderistas rescatados recibían atención médica. Los habitantes de los pueblos de los alrededores recibieron mascarillas y la orden de permanecer en sus casas. La lluvia de ceniza ya ha llegado a la ciudad de Bukittinggi, según Ahmad Rifandi, funcionario de la estación de vigilancia del monte Marapi.

 El país cuenta con casi 130 volcanes activos y está situado en el Cinturón de Fuego del Pacífico, donde las placas continentales generan una importante actividad volcánica y sísmica. Las autoridades han impuesto una zona de exclusión de tres kilómetros alrededor del cráter del Marapi, cuyo nombre significa "la montaña de fuego".