En este Estilo de Vida nos metemos de lleno en la Biodanza, una propuesta de "integración humana" con su espacio los martes de 18.30 a 20.30 horas en Moreno 1157 (Escuela de Biodanza Olavarría). Se trata de grupos mixtos donde se logra "receptividad interna a través de una exploración en grupo", contó Ivana Fernández Treviño desde el espacio.

Tanto ella como su compañero Juan Abel Rodríguez quien es el otro profesor del espacio, contaron que trabajan con los siete poderes de la biodanza, "la vivencia, que es la metodología para acceder a estas sensaciones y momentos de intimidad donde aparecen emociones. El poder musical ya que con música específica las personas vivencian emociones. El otro es la danza integradora que con ese momento pleno de sentido con intencionalidad se van abriendo portales internos y se disuelven corazas que muchas veces hay en las personas. El poder del contacto, con una mirada, un abrazo, tomarnos de las manos,nos volvemos a integrar, es el eslabón perdido que muchas veces no sabemos cómo encontrarlo y ante la presencia de otro ser humano la encontramos. El del trance, que a través de la regresión las personas aquietan la mente, escuchan la voz interna de cada uno y hay una renovación orgánica. El otro poder es el grupo, una matriz colectiva, para saber quién soy ya que nos movemos en el mundo en un espacio vincular y para saber quienes somos necesitamos del otro/a. Y el último poder es la expansión de conciencia, es entrar en esa instancia donde mi yo personal se empieza a disolver, se empieza a aquietar y empieza mi parte más genuina, más sensible, mi verdadera esencia". Son esos siete poderes que se conjugan en una vivencia cada martes con Ivana y Juan. 

Por todo lo que ofrece y lo que puede generar en las personas, Ivana y Juan lo recomiendan e invitan a toda la comunidad a sumarse a su Escuela para participar de las clases de los martes (tendrán una cita previa para una entrevista). También funcionan como Escuela donde forman a otros profesores en la disciplina. Su contacto es 2284-654616 o 2284-466410.

Las clases y

los beneficios

"Las clases son abiertas y Biodanza tiene beneficios como reducción del estrés, ayuda a estar en armonía, expande la conciencia, incrementa la inteligencia afectiva. En las clases vemos que nos acerca a la ternura, a tener una confianza, es un laboratorio existencial, es una introspección, se refuerza la identidad y la identificación con el grupo y con lo trascendente. Incrementa la alegría de vivir, una conexión, cada danza está pensada para que sea organiza y fortalecerlo sano de cada uno", reflexionaron los profesores sobre la actividad.

"Biodanza para vivir más felices", expresaron "nos invita a ponernos en el lugar del otro/a, como un semejante, en relación de cada uno de nosotros porque el otro es mi espejo. Cuando yo te estoy viendo, recibo noticias de mí. Eso es poder ver en el otro lo que tenemos cada uno de nosotros".

En cuanto a los efectos de la Biodanza, está el hecho de "encontrar la integración humana a través de una renovación orgánica y volver a reaprender lo que olvidamos y está en nuestra memoria celular, sentirnos plenos, con deseos y ganas y eso ocurre en una sesión", manifestó Juan.