La contaminación seguirá provocando "millones de muertes prematuras" en el mundo hasta 2050, sobre todo en África, Asia y Oriente Medio, si no se acelera la protección del medioambiente, según el Informe Mundial de Medioambiente (GEO) de la ONU presentado esta semana en Nairobi, en el marco de la IV Asamblea de Medio Ambiente de la ONU.

Actualmente, la contaminación del aire es la causa de entre 6 y 7 millones de muertes prematuras anuales, un fenómeno que está previsto que continúe y que mate cada año a entre 4,5 y 7 millones de personas hasta la mitad de este siglo. Según la ONU, una de cada cuatro muertes prematuras y enfermedades en el mundo están relacionadas con la contaminación.

Además, la aparición de bacterias superresistentes a los antibióticos, provocada entre otras causas por los contaminantes vertidos en el agua y el uso masivo de antibióticos en la producción alimentaria, será en 2050 la primera causa de muerte en el mundo.

Los "disruptores endocrinos", presentes en muchos productos químicos que afectan al sistema endocrino, también alterarán la fertilidad tanto de hombres como de mujeres y el desarrollo neurológico de los menores.

Este informe, llamado en inglés Global Environment Outlook (GEO), en el que participaron 250 científicos de 70 países durante seis años, subraya igualmente una brecha creciente entre países ricos y pobres: el sobreconsumo, las contaminaciones y el derroche alimentario en el Norte precipitan la hambruna, la pobreza y las enfermedades en el Sur.

En este documento se explica que tomar medidas para mitigar los efectos del cambio climático costaría a nivel global 22 billones de dólares, pero los beneficios en salud podrían implicar beneficios de 54 billones de dólares.

Sin una reorganización de la economía mundial hacia una producción más sostenible, el concepto de crecimiento podría no tener ningún sentido ante las muertes y los costes de los tratamientos sanitarios, según los autores.

"El costo de no actuar"

La jefa de ONU Medioambiente advierte sobre "el costo de no actuar" en apoyo del planeta. Msuya hizo esa advertencia en el marco de la IV Asamblea de Medio Ambiente de la ONU que se celebró hasta el viernes en Nairobi.

La directora ejecutiva en funciones de ONU Medioambiente, Joyce Msuya, advirtió del "coste de no actuar ahora contra los retos medioambientales", porque "lo que hagamos va en beneficio del planeta y de las futuras generaciones".

Con todo, confía en que la Asamblea logrará progresos. "Intento ser una eterna e impaciente optimista, creo firmemente que podemos hacerlo, pero no es fácil, como siempre", aseguró.

"Hay tiempo -prosiguió-, se han hecho algunos progresos para lograr combatir los retos que tenemos, como el cambio climático, la protección de la naturaleza y la huella ecológica de la producción de alimentos, pero hay que darse prisa".

Además, el problema guarda relación con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU y "tenemos que darnos prisa", insistió Nsuya, al subrayar que en el foro de Nairobi se prevé que los ministros de Medio Ambiente busquen "soluciones a los problemas medioambientales".

"En una reciente reunión que he tenido con representantes de países pequeños que tienen problemas -explicó-, me han expresado su preocupación por la gestión del riesgo de fenómenos meteorológicos extremos, el impacto de los desastres en sus economía y en el medio ambiente".

Las conversaciones "han ido más allá, porque de sufrir su impacto temen un retroceso en su crecimiento y tener que trabajar aún más duro para volver adelante".

Además, el impacto de los fenómenos es diferente en países con más población y las soluciones para los retos medioambientales pueden ser distintas dependiendo del número de habitantes, aseguró.

800 mil en Europa

La contaminación ambiental causa cada año 800 mil muertes prematuras en Europa, el doble de lo hasta ahora estimado por la Agencia Europa del Medioambiente y acorta la esperanza de vida de los europeos en 2,2 años.

"La contaminación ambiental causa más muertes prematuras al año que el tabaco, que la Organización Mundial de la Salud estimó responsable de 7,2 millones de muertes en 2015. Fumar es evitable pero la contaminación ambiental, no", afirmó Thomas Münzel, investigador del Departamento de Cardiología de la Centro Médico Universitario de Mainz, en Alemania, y coautor del estudio.

Fuente: www.noticiasambientales.com.ar