Un violento hecho ocurrido durante la madrugada del domingo en un boliche bailable en Pueblo Nuevo generó conmoción en la ciudad de Olavarría. Por el episodio, un joven de 18 años se encuentra en grave estado de salud luego de haber sido golpeado por un personal de seguridad del lugar, en circunstancias que son materia de investigación.

La víctima, Juan Ignacio Agapito, sufrió una doble fractura y traumatismo de cráneo, por lo que debió ser intervenido quirúrgicamente en el Hospital Municipal Dr. Héctor Cura durante la tarde del domingo.

En la causa interviene la UFI N.º 7 a cargo de Christian Urlezaga, que se encuentra reuniendo testimonios del hecho y revisando las cámaras de seguridad que se encuentran en el lugar, pertenecientes tanto al local como al Municipio. Asimismo, se le realizaron pericias alcohólicas al joven.

En diálogo con El Popular, el abogado Sergio Roldán contó que se reunió esta mañana con el entorno, quienes lo pusieron al tanto de la situación para determinar los pasos a seguir en la causa.

"Nos presentamos en el transcurso de la mañana como particular damnificado en la Investigación Penal Preparatoria. Estamos buscando testigos para tratar de pedir la detención de esta persona", señaló.

El hecho

Según contó Roldán, los primeros indicios indican que el hecho se produjo pasadas las 2 de la madrugada en el boliche Fomento Disco. A raíz de un inconveniente dentro del lugar, el joven y sus amigos fueron retirados por personal de seguridad. "Hubo algún problemita adentro y lo retiraron, hasta ahí se actuó bien", aclaró.

Una vez afuera, el grupo de jovenes comenzó a propinar patadas a un portón del boliche. En ese momento "salen dos personas, una de ellas el seguridad que está identificado y le pegan un tremendo golpe de puño, que lo desvaneció y lo hzio caer cuerpo muerto contra un auto y el cordón de la vereda", comentó.

"Ahí quedó tirado durante 15 o 20 minutos hasta que salió esta persona y lo agarró de la ropa y lo arrastró hacia adentro de Fomento. En principio me habían dicho que lo entraron para brindarle auxilios, pero la manera en que lo llevan a rastras se ve que no fue con la idea de prestarle auxilios", sostuvo.

Si bien hasta el momento se desconoce el resultado de las pericias alcohólicas, Roldán remarcó que "en caso de que el chico se haya emborrachado no justifica que una persona preparada para golpear -porque es una persona que entrena y es casi un boxeador- propine semejante golpe de puño a un pibe que pesa 55 kilos. Es un masazo mortal".

Hasta el momento, el expediente está caratulado como "lesiones graves", aunque esperan que "a medida que avancen las pruebas habrá algun agravamiento. No es lo mismo pelearte con alguien de la calle que con alguien preparado para golpear".

Respecto al hecho y a la salud de la víctima, dijo que "es una barbaridad, tenemos que terminar con este tipo de situaciones. No puede ser que alguien salga a bailar y porque se tomó una cerveza de más le termine costando la vida. Es una operación muy delicada. Está muy grave, con pronóstico reservado y depende de un milagro para que sobreviva y que no le quede ninguna secuela de semejante episodio".

Testigos por sobre cámaras

Roldán contó que se encuentran en la búsqueda de personas que estuvieron en el lugar y que hayan presenciado el episodio. "Me interesa gente que realmente haya estado en el momento, que haya estado en el episodio y lo haya visto. Habia muchos jovenes afuera. Efectivamente vamos a presentar un par de jóvenes que dicen haber visto la situación, con la idea de probar quien en principio sería la persona que lo golpeó", indicó.

En cuanto a las cámaras, destacó que "tenemos una filmación donde se ve claramente cómo lo tratan al chico ya en coma en ese momento, cuando debería haber necesitado los primeros auxilios".

No obstante, fue contundente y aseguró que "cuando hay que buscar imágenes siempre aparecen las imagenes que quieren que aparezca". En ese sentido, dijo que "no tengo por qué desconocer las camaras, pero da la sensación de que cuando pasa algo aparece alguna cámara apagada o la filmación por la mitad".

Es por ello que subrayó la importancia de los testigos por sobre las cámaras de seguridad: "me interesan más las personas que ocularmente y por sus sentidos pudieron ver y captar la situación".