@dariomachado9

La situación de los siniestros viales es una problemática constante no sólo en Olavarría, sino también en la mayoría de las ciudades de todo el país. En nuestro partido en el 2020 descendió la cantidad de personas fallecidas en choques, y además de manera oficial se refirió que en relación a 2019 bajaron 40 por ciento los siniestros viales y más del 50 % las personas que resultaron heridas. Mientras continúan las tareas de concientización y educación vial, se avanza en pensar cómo será la Olavarría del futuro: apuestan a más bicisendas, bicicletas y peatonales y menos automóviles.

En una entrevista con EL POPULAR, el responsable del Observatorio Vial de la Municipalidad y funcionario de la Dirección de Control Urbano refirió cuál fue la realidad de la siniestralidad vial en el partido de Olavarría durante el año 2020, cuando durante varios meses el tránsito estuvo notablemente reducido, tanto en la ciudad como en las rutas, producto del aislamiento social, preventivo y obligatorio por la pandemia del Covid-19.

"Con todo el tema de la pandemia bajó 40 por ciento lo que es la siniestralidad en relación a 2019", expuso el ingeniero Falivene, quien comparó que se pasó de 1230 accidentes en el año 2019 a 750 en 2020. "Analizando mes a mes, abril, mayo y junio bajó drásticamente, cuando estuvo todo cerrado. Esto es muy simple, a menos movimiento menos choques", explicó. Tal es así que de 3,3 siniestros viales por día que hubo en promedio en 2019 se bajó a 2 choques diarios el año pasado.

Además indicó a este Diario que sumado al descenso del 40 % en siniestros viales hubo una notable baja en la cantidad de personas heridas por choques, del rigor del 53 por ciento. Pasaron así de 927 en 2019 a 435 durante el 2020. En tanto, y tal como fue expuesto en el informe de la edición impresa del pasado domingo de EL POPULAR, las víctimas fatales fueron 12, y siete de los choques ocurrieron en el casco urbano.

El especialista refirió que los datos acerca de los siniestros viales en la ciudad es recabada a través de tres vías. Por un lado mediante el 911 y la información que llega a la Policía de la Provincia. Se suma a esto los informes del Hospital Municipal, en el caso de los choques con personas heridas. Y finalmente a través del Centro de Monitoreo Municipal se amplían estos datos.

Mes a mes estos números son elevados al Sistema Integral de Gestión de la Información de Seguridad Vial (Sigisvi), desde donde se carga la información para crear luego la estadística provincial y nacional. Falivene aclaró que, sobre lo sucedido en 2020, todavía no tienen todos los datos relevados, por lo que esperan durante el transcurso de este mes poder presentar el informe anual.

Pero, ¿y qué se hace con esta información? Desde 2011 estos datos se cargan a un sistema de georreferenciación, al que se acude cuando se da algún problema en determinado sector de la ciudad, para revisar cuál es el nivel de siniestralidad que hay allí. "Porque lo importante es, como concepto, que una esquina no es peligrosa porque cuando chocan vuelcan, es peligrosa porque chocan mucho aunque choquen despacio. Esas cosas son las que analizamos para después poner un semáforo, poner reductor de velocidad, poner cartelería. No es solamente los reclamos que tenemos sino también los entornos", refirió Falivene.

Concientización al volante

Son diversas las propuestas que se evalúan desde el área de Control Urbano con el propósito de reducir la cantidad de accidentes que ocurren a diario en la ciudad, algunas de las que dependen de las medidas que se tomen en torno a la emergencia sanitaria para poder aplicarlas. La urgencia actualmente se enfoca en evitar que colapse la terapia del Hospital, tras un mes en el que ocurrieron tres choques con víctimas fatales.

"Lo que nos está pasando ahora es que de las camas de terapia hay un montón de camas ocupadas por los accidentes de tránsito. Entonces tenemos otro problema, por ahí los contagios son menos, los internados son 3 ó 4 y tenés los respiradores, que en vez de usarlo por el Covid tenés que usarlos por los traumatizados por accidentes, y mañana te ocurre un vuelco en la ruta, y quedan 4 ó 5 y los tenés que llevar al Hospital y capaz que colapsas", manifestó Falivene con preocupación.

Producto de que en 2020 no se pudieron realizar las campañas de concientización vial en las escuelas, la semana pasada comenzaron a entregar folletos a los automovilistas en los controles de tránsito. Se abordan allí varias situaciones, como el exceso de velocidad, el uso del teléfono celular y el respeto a las normas de tránsito.

Falivene refirió que el año pasado se iban a implementar charlas de concientización para quienes tramitan el carnet de conducir por primera vez, y también "hacer lo mismo con la gente que había tenido faltas graves, alcoholizados, maniobras bruscas. Obligarlos a que tengan que tomar una charla de dos horas, relacionado con la concientización, como lo que hacemos con las escuelas con los chicos de la secundaria, para que vean estos aspectos".

Acerca de la situación vial en la ciudad, mencionó que hay "calles muy anchas, que está buenísimo porque te da una fluidez bárbara en el tránsito, pero hace que la gente acelere mucho", algo que se acrecienta por la ausencia de cunetas. Reflejó igualmente que las mesetas ubicadas antes de las rotondas permitió que bajara "drásticamente" el número y gravedad de siniestros viales en estos puntos.

Mientras destacó que es notable cómo los conductores de Olavarría respetan a los peatones y también que la mayoría de los motociclistas usan el casco; expuso que hay muchas personas que conducen mientras utilizan los teléfonos celulares y se mostró muy preocupado por la cantidad de niños que viajan en los asientos delanteros. "Ante una frenada el chico termina contra el parabrisas, y se da mucho que el único lastimado es un menor", refirió acerca de las estadísticas.

Avenida Colón y Sierras Bayas

"Ese tramo de la Colón es el tramo donde más choques tenemos", explicó Falivene sobre el sector que se ubica entre la avenida Pringles y Brown. Luego siguen las avenidas Del Valle y Pringles y "después tenés intersecciones puntuales porque hay mucha circulación", indicó.

Acerca de lo que ocurre en la avenida Colón, dijo que a pesar de que se han puesto varios semáforos es una zona que se mantiene con un alto nivel de siniestralidad, porque "se andan rápido, quieren llegar al semáforo y terminan pasando en rojo". Justamente en el semáforo del cruce con España es donde pusieron las primeras cámaras de fotomultas para quienes pasan en rojo, y advirtió que "vamos a seguir reforzando la Colón" este año con los mismos dispositivos.

Por otra parte, mencionó como "punto negro" la situación que se da en el cruce de la ruta 226 y el acceso a Sierras Bayas, donde a principios de enero pasado un conductor chocó y murió. "No nos corresponde hacer la obra porque es nacional, hace unos cuantos años que venimos charlando con Nación, es una obra muy grande, vamos a ver si podemos poner un radar fijo", planteó el especialista. "Con el radar fijo bien señalizado creo que va a mejorar para calmar un poco a la gente que pasa, es un punto complejo, no se soluciona fácilmente", expuso Falivene.

Más bicis y peatonales

El ingeniero Agustín Falivene no duda en plantear que, de manera paulatina, los olavarrienses vamos a tener que acostumbrarnos a caminar y andar en bicicleta cuando nos acerquemos al centro, y dejar los vehículos estacionados en casa. "La idea nuestra es sacar la mayor cantidad de autos posibles de la ciudad y que la gente se maneje un poco más en bicicleta, en alguna moto eléctrica, caminando. Generar mayores cuadras peatonales, esa es la tendencia", expuso.

"Entiendo que acá en Olavarría es medio complicado, la gente quiere ir a la farmacia y estacionar en la puerta, hacer 100 metros para ir al cajero, no dejar el auto y caminar. Y si te ponés a pensar terminan tardando más, dan vueltas, buscan dónde estacionar, y más allá del gasto de combustible y la contaminación, perdés un montón de tiempo", indicó sobre las costumbres de los ciudadanos a la hora de conducir.

Sin embargo, reiteró que "la idea es poder ir metiendo bicisendas donde realmente se necesitan, hemos puesto bicicleteros, hemos puesto más estacionamientos de motos porque realmente se necesitaban más. La idea es de a poco que la gente se vaya concientizando, que vaya dejando el auto y agarre la bicicleta".

En este sentido, si bien expuso que no sería nada sencillo impedir el tránsito de vehículos en ciertos sectores céntricos en las horas de más fluidez automovilística, apostó a avanzar en la creación de bicisendas como la que recorre la calle Brown desde avenida Sarmiento hasta Del Valle. "Hay proyecciones e ideas de ir armando bicisendas en diferentes lugares y que la gente pueda andar más en bicicleta", aseguró.