Después de casi cinco décadas de actividades sólo interrumpidas por la inundación, la Expo Olavarría se suspenderá este año y sus alcances se limitarán exclusivamente a la muestra ganadera impulsada por la Sociedad Rural (SRO), cuyas autoridades están a punto de definir la fecha de realización. Mientras tanto, otros encuentros convocantes y masivos se mantienen en suspenso, aguardando las decisiones de las autoridades sanitarias. Todo, en el marco de la emergencia sanitaria por la pandemia de coronavirus, que en Olavarría supuso un retroceso a partir de la aparición de un nuevo brote luego de un período de calma.

"Estamos muy complicados. Pero de alguna manera, los Reyes llegarán el próximo 5 de enero: nos ponemos en manos de Dios para lograrlo", se esperanzó Claudia Díaz, una de las impulsoras de la tradicional bajada de los Magos en Sierras Bayas, imaginando un escenario "que tal vez, no necesariamente reúna gente" en el sentido presencial.

A su turno, el mentor del Festival de Doma y Folklore Ricardo Sosa estimó que "el festival se va a hacer sí o sí, pero claro que en el momento en que nos lo permitan las autoridades. ¿Por qué? Sencillamente porque ya tenemos más de 5 mil entradas vendidas, no vamos a defraudar a toda esa gente y hemos apostado a contratar a Luciano Pereyra, a quien ya le abonamos una parte de su cachet, un dato que no es menor".

Desde el Municipio, la subsecretaria de Cultura, Agustina Marino, admitió que "todavía no tomamos decisiones respecto de las fiestas más importantes, que se nuclean en los últimos meses del año; la realidad es que se irá evaluando sobre la base de la evolución de las fases y las condiciones que imponen los protocolos provinciales, ya que se trata de espacios que reúnen a mucha gente". Eso, en alusión a eventos tan convocantes como Un Aplauso al Asador y la Fiesta de Olavarría, por citar algunos.

Muestra ganadera

"La Expo Olavarría no se hará este año; se suspendió. Y si todo mejora (a nivel sanitario) sí se concretará la muestra ganadera de sólo dos días de duración: los animales entrarán un día y al siguiente por la mañana se jurarán, para venderlos por la tarde", confirmó Alberto Zulaica desde la Sociedad Rural (SRO).

Esto significa que la tradicional vidriera del comercio y la industria local no será parte de la agenda de octubre, como lo viene siendo desde hace décadas. En la década del ´80 tuvo algunas interrupciones a causa de la inundación, pero los memoriosos evocan que por lo menos "desde 1996 se ha sucedido sin descansos". Lo cierto es que la pandemia y el consecuente aislamiento llegaron para cambiarlo todo, y la abrupta caída en las ventas y la interrupción de los canales normales de comercialización empujaron la decisión de la Cámara Empresaria de Olavarría (CEO), la otra pata en la que se apoya la megamuestra. "Es inimaginable; no está dado el contexto y además, una exposición como esta requiere de meses de preparación", describió el presidente de esa entidad, contador Mario Antista. En la misma línea, desestimó que se realice, en agosto, la Expo Mujeres Olavarría, que suele ocupar el espacio del CEMO con la exhibición de emprendimientos debidos exclusivamente a mujeres.

Respecto de la fecha que se baraja para la exposición ganadera, tentativamente se habla del lunes 28 y martes 29 de septiembre, siempre dependiendo de cómo se vayan sucediendo las cuestiones sanitarias. "Estamos por confirmar la fecha, ya que buscamos no superponernos con otras realizaciones de la misma naturaleza", definió el gerente de la entidad ruralista.

En cambio, alertó que "seguimos pensando en fortalecer el trabajo remoto", mientras "vamos presentando protocolos para que los artistas vuelvan a los ensayos y para abrir museos y centros culturales".

De la doma a los Reyes

Ricardo Sosa, el impulsor del Festival de Doma y Folklore que organiza cada diciembre el Club Ferro Carril Sud, está convencido de que ese evento "se va a realizar sí o sí; la historia es cuándo, porque primero tiene que pasar la pandemia y nosotros dependemos de que nos lo permitan las autoridades. Lo vamos a hacer sencillamente porque ya tenemos más de 5 mil entradas vendidas, no vamos a defraudar a toda esa gente".

El tradicional encuentro nativista está anunciado, tentativamente, entre el próximo 11 y el 13 de diciembre inclusive en el predio ferial de la Sociedad Rural, en Ituzaingó Sur. "Hemos apostado a contratar a grandes figuras, como Luciano Pereyra, a quien ya le abonamos una parte de su cachet, un dato que no es menor", argumentó Sosa. "Pero dependemos de lo que decidan las autoridades sanitarias. Porque... imagínese una jineteada con miles de personas aglomeradas ante las vallas", graficó finalmente, con temores obvios.

Para Claudia Díaz, integrante de la comisión que impulsa la tradicional Fiesta de Reyes en Sierras Bayas, hay una sola certeza. "De alguna manera, los Reyes llegarán el próximo 5 de enero: nos ponemos en manos de Dios para lograrlo", dijo ante la consulta de este Diario.

En realidad, el aislamiento social preventivo y obligatorio paralizó la actividad que durante todo el año y sin descanso desarrollan los sierrabayenses para recolectar fondos para el próximo enero: ventas de canelones, pollos y otras exquisiteces gastronómicas cada quince días; el Festival de la Empanada que ya tenía fecha para el 19 de abril; el Bingo del 25 de mayo; la Fiesta del Choripán Serrano para el 25 de octubre, que "tampoco sabemos si lo vamos a poder hacer o no, porque dependemos de las medidas sanitarias que va disponiendo el gobierno".

"Estamos complicadísimos", asumió Díaz a partir de la imposibilidad de encontrarse y concretar actividades ante "un año sabático" que nadie esperaba. Y que los puso a confeccionar barbijos hasta llegar a los 1900 que donaron al equipo de Salud, al Hospital lugareño y al destacamento policial serrano. "Si siempre llegamos con el 50% de lo que nos cuesta la fiesta -analizó en referencia al financiamiento de la fiesta-, es imposible imaginarse lo que será esta vez, con ningún fondo, porque además todos estamos en la misma problemática, desde los comerciantes hasta los dueños de las canteras". Igualmente, exhibió su fe y optimismo al asegurar que "los Reyes llegan, siempre llegan el 5 de enero", tal vez "con algo íntimo, chiquito" a partir de "algunas ideas para suplantar la fiesta grande, algo que no junte gente" en formato presencial pero que reproduzca la magia de esa noche, que en 2021 llegaría a la edición 57ª y a la cual la Comisión no quiere renunciar.