Terapias Holísticas: trabajar sobre la totalidad del ser
Lucila Elichagaray es una joven que ha decidido incursionar en las terapias holísticas, que ha ido profundizando con otras técnicas. Ha incorporado infusiones medicinales entre otro elementos, todos en búsqueda del bienestar sobre la totalidad del ser, "entendiendo a la persona no sólo como su cuerpo físico sino también alguien que tiene emociones, que piensa de una determinada manera", dice Lucila.
Lucila Elichagaray Fernández, tiene 25 años, es terapeuta holística y estudiante de yoga y nos cuenta que "las terapias holísticas que profundizo son la terapia con Flores de Bach y Reiki. Después voy mechando distintas herramientas, técnicas de yoga que ayudan mucho a complementar la terapia, como es la meditación, técnicas respiratorias. También me inicié en un rito que se llama ?rito de sanación del útero?. Me gusta trabajar mucho con infusiones medicinales, me gusta trabajar con saumos, con aromaterapia, que también son herramientas muy poderosas".
Las terapias holísticas -nos cuenta Lucila- "buscan trabajar sobre la totalidad del ser, entendiendo a la persona no sólo como su cuerpo físico sino también alguien que tiene emociones, que piensa de una determinada manera. Se trabaja mucho sobre fortalecer nuestro auto concepto, nuestra autoestima, sobre la reprogramación de nuestros mandatos. Una cosa que trabajamos en terapia floral es la reprogramación de nuestros mandatos familiares negativos, que es lo que ingresa al subconsciente de los niños cuando son muy chiquitos, viendo lo que sucede en su entorno, generalmente de mamá y papá. Tenemos mandatos positivos y otras veces traemos mandatos negativos y eso se trabaja, se reprograma con el fin último de lograr el bienestar en el día a día. Siempre tenemos esta idea de que lo mundano y lo espiritual van por separado y lo que se busca es justamente trabajar desde la idea de unidad, de que somos uno. Primero empezando a reconocernos como parte del todo, como una unidad, empezar a relacionarnos, vincularnos con nuestro entorno de forma más amorosa. Son varias terapias que se fusionan en una, al menos a mí me sale trabajar de esa manera porque yo siempre digo que hay una terapia o un tipo de medicina para cada tipo de persona".
"Llego a yoga como una forma de desestresarme, porque en ese momento estudiaba medicina veterinaria y estaba muy contracturada, fui por las contracturas y poco a poco, sutilmente fue haciendo su efecto de ir equilibrándome, armonizándome en los distintos planos del ser. Porque el Yoga de lo que trata es de la búsqueda del Ser. Después de hacer las clases decido que quiero estudiar Yoga, que quiero profundizar y a través de mi profe de Yoga conozco la terapia con Flores de Bach, que siempre digo que fue la cuerdita que me sacó del pozo, en un momento en el que yo estaba atravesando un duelo importante, fue mi rescate. Es un antes y un después en mi vida cuando llegan estas herramientas".
Flores de Bach
"La terapia con Flores de Bach", continúa Lucila, "es a lo que más me dedico hoy en día y es el eje central de mi actividad. A través de la propia experimentación fue que decidí dedicarme a la terapia con Flores de Bach, es la terapia con la que me encontré a mí misma".
"Las flores de Bach es una terapia descubierta por Edward Bach, médico homeópata inglés, que buscaba una medicina que no nos dañe más que la enfermedad, porque estaban acostumbrados a los medicamentos muy nocivos. Él veía que sus pacientes tenían ciertos rasgos, características de personalidad, que coincidían con los síntomas que presentaban. Entonces él asocia la enfermedad a desequilibrios psicoemocionales y empieza a experimentar, se enferma, se va a vivir a la naturaleza y comienza a conectar de manera intuitiva con las flores, con las distintas plantas. Entonces en Gales, en un entorno muy natural, descubre con el paso de los años 38 esencias florales".
"Bach desarrolla un método de extracción de la esencia floral, que es la energía universal canalizada a través de la flor. Todos tenemos energía vital prana, lo estudian distintas ramas de la medicina o de las terapias, la Medicina China, el Ayurveda, el Yoga, el Reiki, estamos hablando de la energía vital que está en todos los seres. Esta energía de las plantas se la extrae por medio del agua, porque el agua tiene la capacidad de absorber todo, por medio de la exposición al sol y del agua. La terapia con Flores de Bach es una terapia en donde se habla, se buscan las emociones que está experimentando la persona, y desde ese lugar se combinan distintas esencias, podes tomar una flor o podes tomar una fórmula compuesta de varias esencias florales, dependiendo siempre lo que vayas a tratar. Al ser una terapia bioenergética lo que busca es equilibrar, armonizar".
Reiki
"El Reiki lo experimento desde muy chiquita con mi tío Fer, con 9 o 10 años yo sentí la energía de Reiki por primera vez. Es como que siempre estuvo en mi vida Reiki". Lucila continúa explicando que: "Reiki es la canalización por medio del terapeuta de la energía vital universal, que eso pasa a través de uno en realidad sin la intención del terapeuta. El terapeuta es canal, yo no te pongo las manos y digo ?te voy a curar?, en realidad es la energía y es la voluntad divina, la voluntad universal o como cada uno lo siente y quiera llamarle, que actúa a través del canal, que es el terapeuta, y que es canal simplemente porque hizo un trabajo de iniciación en el que armonizó su energía, sus chakras, sus canales, en esto hay que tener el corazón y la mente muy abiertas, porque estamos hablando de otros planos del ser que están dentro nuestro. Es la totalidad de nuestro ser, lo que trabajamos por medio de estas terapias", afirma Lucila.
También comenta que: "ahora estoy cursando profesorado de yoga en la escuela de Natha Yoga, la central de la escuela está en Necochea, la filosofía de la escuela lo que dice es que hay que llevar la espiritualidad al día a día, con mi familia, en mi trabajo. No necesito aislarme del mundo, hacer un trabajo espiritual fuera de lo que es el cotidiano y eso está bueno porque nos ayuda a vivir desde un lugar de menos estrés, de mayor comprensión, mayor conciencia de lo que me sucede, aceptando más y el no vivir en estrés pues genera todo un efecto a nivel físico de depuración, de desintoxicación. Vivimos más tranquilos, pudiendo pensar con claridad a la hora de tomar una decisión, a la hora de actuar, estamos más calmos y nuestro cuerpo no se enferma tanto, se aumenta nuestra inmunidad y tiene muchos beneficios vivir con mayor paz, mayor equilibrio, menos estrés".
Lucila afirma que "me gusta compartir desde lo que yo experimento, desde mis propias vivencias, compartir mis procesos y acompañar los procesos en el camino de cada persona, pero es un camino de auto sanación y de autoconocimiento. Al fin y al cabo, como decía Bach ?cúrese a usted mismo?. Uno tiene que tomar el compromiso para con uno mismo y ser consciente que está iniciando un camino de despertar, un camino de sanación y sobre todo de autoconocimiento porque cuando uno empieza a conectar con uno mismo, cuando empezás a escucharte, en tu interior está todo, todo lo que necesitas. Y la energía, las flores, la naturaleza nos terminan recordando quiénes somos, de dónde venimos. Terminan recordándole al cuerpo la capacidad de sanarse a sí mismo. Y tanto el yoga, como las Flores de Bach, el Reiki y las distintas terapias vienen a recordarnos ese camino", finaliza Lucila.
Sanación de útero
Lucila nos explica que es el rito de sanación de útero, "es un rito munay kí de la cultura maya que se transmite de mujer a mujer, lo transmitieron las chamanas en su necesidad de sanar el útero, de sanar la energía femenina, la energía creadora, de sanar la relación que la mujer tiene con su cuerpo. La conexión con las raíces, y de reconectar con nosotras y con el ciclo, nuestro ciclo que es un ciclo lunar. La energía femenina va muy alineada a la energía de la luna. Se trabaja con la siembra que se hace en cada luna nueva, se nutre el rito. Es un rito de amor muy hermoso que se transmite entre mujeres y también a los hombres, porque ellos también tienen que sanar su linaje femenino, cuando hablamos de femenino o masculino hablamos de energía, entonces los hombres pueden conectar con la energía de su mamá, de sus abuelas, se sana todo el linaje, sanas desde tu presente, sanas tu pasado, tus generaciones pasadas y tus generaciones futuras".
Nos dice que todo empieza en "la reconexión con nuestro ciclo y la sanación femenina. La mujer tiende a sufrir mucho por su ciclo. No lo aceptamos y tenemos un montón de limitaciones que no es lo natural, lo natural es aceptar mi ciclo, ver que ahí está mi poder, está la capacidad de depurarme, está la capacidad de crear mi vida, más allá de poder crear vida, y poder gestar, está la capacidad de poder crear mi vida. Porque a la altura de nuestro útero tenemos un chakra muy importante que está relacionado a la creación, que todos lo tenemos, tanto hombres como mujeres.
"La iniciación", continúa Lucila, "se da en un rito que puede ser entre dos personas o puede ser un grupo de mujeres y hombres, se habla en rondas, se da una charla introductoria de lo que es el ciclo, de lo que son las fases de la luna, como cada fase de la luna representa una fase de nuestro ciclo. Y en el rito simplemente lo que se hace es decir unas palabras donde nos liberamos del sufrimiento y del dolor, porque se concibe al útero como un cuenco sagrado y como un cuenco sagrado que almacena todas nuestras memorias, memorias de enfermedades, abortos, violaciones, y no solo de mi vida, sino que también de mis ancestras. Entonces, toda la carga que tiene la mujer también a nivel social, todo lo que se almacena es como un punto energético y mes a mes la mujer se depura. Luego en el rito se dicen unas palabras para liberarnos de todo ese sufrimiento, todo ese dolor y conectar con nuestro poder creador, con nuestra voluntad. Después mes a mes, durante un año vos nutrís el rito, en luna nueva entregas a la tierra tu ciclo, porque mes a mes vamos cumpliendo un ciclo, en ese ciclo pasan un montón de cosas, entonces vos lo entregas a la tierra, que la tierra es la que se encarga de sostenerlo, de transmutarlo, concluye Lucila. Quienes estén interesados en comunicarse con Lucila pueden hacerlo al instagram@luterapiasdelanaturaleza.