"El sobrepeso es la mayor predisposición a la hipertensión, sobre todo la grasa concentrada en el abdomen. Es la causa número uno de muerte porque genera muchísimas patologías", asegura el Dr. Martín Viñuales. En su columna semanal de Mejor de Mañana, el reconocido médico habló de hipertensión y remarcó los nuevos consensos a partir de los cuales se debe comenzar a medicar.

"Si se baja la grasa abdominal se mejora mucho. Si tengo 160 de hipertensión, puedo bajar entre un 10 y un 15% por el solo hecho de bajar un diez por ciento de peso. O sea que con solo bajar un 10% de peso ya tengo un beneficio importante", remarcó.

Al mismo tiempo, hizo especial hincapié en los cuidados con las comidas y el sodio agregado. Pero hay un dato positivo sobre la necesidad de abandonar la sal: "a la gente le cuesta pero si bien es muy fuerte al principio, hay mucha capacidad de adaptarse. Llama la atención pero los pacientes manifiestan que les costó dejar la sal el primer día pero después ya no". Además, explicó que "el sodio retiene líquido. La presión arterial es como si yo tuviera una manguera donde circula agua y cuando más agua hay adentro mayor presión hay. Entonces si tengo más sodio que retiene más agua entonces tengo más posibilidad de que haya más presión. Y los riesgos de la presión alta son un infarto de miocardio, el accidente cerebro vascular o el fallo renal".

Así como el sodio perjudica, el potasio beneficia y contribuye a que la presión baje. Los alimentos que tienen potasio son las frutas y verduras como el kiwi, banana, tomate. "Y hay algunos alimentos que tienen efecto diurético, como la cebolla, puerro, brócoli que se deberían consumir en sopas. Y a esto hay que agregar tomar mucha agua".

El tratamiento de hipertensión se comienza con con estas medidas simples: estimular descenso de peso y realizar actividad física. Pero, por supuesto, en muchos casos se requiere de tratamiento farmacológico. "Hay muchas posibilidades para tratar. Si bien antes se consideraba hipertensión cuando se superaban los 120-80 de presión, en el 2014 hay consensos médicos y lo han subido a 150-90. Recién ahí se considera hipertenso".

"Lo determinante -insistió- es el sobrepeso. Tomar conciencia y no tener una actitud tan pasiva", concluyó.