Para el próximo martes estaba pautado el inicio del proceso oral y público en el que un jurado de civiles iba a determinar la culpabilidad de Pais sobre el homicidio de la joven de 19 años, audiencias que se extenderían hasta el viernes 26. Las jornadas se iban a realizar en la sede de la Excelentísima Cámara Penal de Apelación y Garantías del Palacio Judicial de Azul, que se encuentra acondicionada para llevar adelante juicios por jurado en el marco de la pandemia por Coronavirus.

Sin embargo, ayer el Tribunal Oral en Criminal Nº 1 de Azul resolvió la suspensión del juicio, aunque de manera inicial no se refirió cuál será la fecha en la que se reprogramará el debate. Fuentes consultadas por este Diario indicaron que la solicitud de suspensión fue realizada por la defensora oficial María Laura Serradell, titular de la Unidad de la Defensa Penal Juvenil Nº 7 de Azul, y quien asumió la representación legal de Pais de manera reciente, por lo que solicitó un plazo para interiorizarse de la causa.

Llamativamente la doctora Serradell es la tercera defensora oficial que asiste a Pais en el marco de esta investigación. De manera inicial asumió ese rol la doctora Soledad Kelly, de la defensoría 5 de Olavarría, quien se excusó en noviembre del año pasado, poco antes de que se realizará la elevación a juicio de la causa. En ese momento fue designado el defensor azuleño Diego Prado, quien de forma reciente también se excusó de la defensa del joven.

En la instancia de debate será el doctor Joaquín Duba, vicepresidente del TOC 1 de Azul, quien encabece la coordinación de las audiencias y sea el juez técnico que resolverá la pena que le corresponderá a Pais, siempre y cuando el jurado de civiles disponga un veredicto condenatorio, para lo que deben coincidir 10 de los 12 jurados. En tanto, para ser condenado a prisión perpetura el voto debe ser unánime. En caso de que se diera alguna de estas situaciones, la defensa puede apelar el fallo, pero si los civiles lo declararan "no culpable", el acusado será absuelto y esta determinación no puede ser apelada.

A lo largo de gran parte de la instrucción de la causa la investigación estuvo a cargo de la fiscal María Paula Serrano, titular de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 4 de Olavarría, aunque en el debate oral y público que se llevará adelante en los tribunales de Azul el rol de la parte acusatoria estará encabezado por el fiscal tandilense, Luis Humberto Piotti.

El femicidio

Valentina Gallina, de 19 años, fue asesinada en la mañana del 4 de enero de 2020 en un domicilio del barrio Isaura. La primera hipótesis sobre la que trabajaron los investigadores, y que fue defendida y reiterada por el homicida en distintas circunstancias, refería que habían disparado desde el exterior de la vivienda y un proyectil le había impactado en la cabeza a la joven. La rápida labor de los peritos permitió descubrir que esta versión era falsa, y que el verdadero asesino era Pais, de 30 años.

En cuestión de pocas horas, el femicida pasó de ser el único testigo al principal sospechoso por el crimen de la joven. Ese mismo día Pais fue imputado por ser autor del delito de "homicidio triplemente agravado por el vínculo, por ensañamiento y por mediar violencia de género (femicidio)", y bajo la misma figura penal la causa fue elevada a juicio.

"Relata muchas armas, muchos disparos, mucha gente durante más de siete horas en su vivienda (...) resulta imposible e inexplicable que frente a dicho panorama ni él ni Valentina hayan presentado heridas de arma de fuego, teniendo en consideración las dimensiones del lugar", fue uno de los planteos de la fiscal Serrano acerca de la falsedad de la coartada de Pais, en la instancia de requisitoria de elevación a juicio.

Las tareas realizadas por peritos de Policía Científica en la vivienda de Lamadrid y calle 118, y el resultado de la autopsia realizado en el cuerpo de Gallina, permitieron exponer que la joven había sido víctima de una violenta golpiza que le provocó la muerte.

Para la fiscalía, "no cabe duda que la agresión de Pais a Valentina estuvo enmarcada en un contexto asimétrico y de cosificación a la mujer por su condición de tal, que se venía acentuando en el tiempo de manera continua y persistente, tanto hacia ella como a sus exparejas". La autopsia reveló que la joven falleció producto de un "edema craneal" provocado por una golpiza. "Le propinó una cantidad indeterminada de golpes en todo su cuerpo así como también la agredió utilizando un elemento punzocortante en la zona de cabeza, ocasionándole a nivel externo múltiples lesiones punzocortantes compatible con elemento productor que posee punta y filo, en cuero cabelludo, en un número superior a 15", indica el informe.

El crimen de Valentina despertó un importante movimiento en Olavarría y en la región, y dos días después del femicidio se desplegó en el centro de la ciudad una masiva movilización en la que se pedía Justicia por la joven. Paradójicamente, la madre de la mujer de 19 años, Valeria Cazola, había sido asesinada en el año 2008 por su pareja.