María Josefa Bonazza, sobreviviente del trágico derrumbe del hotel Dubrovnik en Villa Gesell, compartió su relato desde el hospital donde se recupera de sus lesiones. Bonazza y su esposo, Federico César Ciocchini, habían llegado desde Balcarce para realizar una reunión previa a la temporada de verano. Sin embargo, fueron sorprendidos por dos fuertes explosiones que precedieron el colapso del edificio.

Al quedar atrapada entre los escombros y notar que su esposo no respondía, Bonazza permaneció lúcida, aplicando técnicas de yoga para controlar su respiración. Para pedir ayuda, comenzó a emitir señales en código Morse, golpeando el concreto cercano en un intento de hacer el sonido de S.O.S. Finalmente, fue localizada por los rescatistas, quienes la trasladaron en helicóptero a Mar del Plata, donde se le trataron fracturas en el hombro y la muñeca.

Actualmente, ya son siete las víctimas mortales del colapso, incluyendo a Ciocchini. Este martes, se encontraron otros tres cuerpos, identificados como Mariano Troiano, Matías Chaspman y Ezequiel Matu, mientras continúan los esfuerzos para localizar a Dana Desimone, de 28 años, quien aún permanece entre los escombros.