Luego de las denuncias públicas de Sergio Massa y José Luis Gioja, sobre una presunta manipulación en el escrutinio provisorio, que habría subestimado la diferencia de Alberto Fernández sobre Mauricio Macri, el último jueves comenzaron a conocerse los primeros datos del conteo definitivo, que es el que vale para confirmar los cargos en disputa. Y en sólo seis días, se completaron todas las provincias. ¿El resultado? 48,24% el Frente de Todos contra un 40,24% de Juntos por el Cambio. Cambios mínimos respecto a la noche del domingo 27. Alertas exagerados. Otra vez.

Una de las principales dudas estaba con Entre Ríos: después de una dura derrota allí en las PASO, Juntos por el Cambio había logrado revertir allí el resultado según los números que se conocieron el mismo domingo a la noche. Esto suponía un doble mérito: no sólo ganar una de las provincias con más electores del país, sino quedarse con los dos senadores por la mayoría. Y ese adelanto tuvo final feliz para el Gobierno: en el tramo para presidente, el binomio del oficialismo se impuso por escasos 1.074 votos (390.956 a 389.882); para la Cámara alta, la brecha fue más corta aún (1.046 sufragios, 383.799 a 382.753).

Otro triunfo ajustado que se confirmó a favor del oficialismo es el de Santa Fe. También fue por menos de un punto, con el plus de que se trata del tercer distrito electoral del país.

Si se toman las 24 provincias juntas, Fernández creció 468.474 votos y 0,14 punto: pasó de 12.473.709 sufragios y 48,10% a 12.942.183 y 48,24%. Mientras que Macri subió 335.027 votos y bajó 0,09 punto: pasó de 10.470.607 sufragios y 40,37% a 10.805.634 y 40,28%. La diferencia creció 133.447 votos: de 2.003.102 a 2.136.549. En porcentaje, pasó de 7,73 en el provisorio a 7,96: 0,23 se amplió la brecha. Casi nada. Lejísimos de las advertencias de Massa y Gioja.

Fuente:Clarín.com