La Corte Suprema británica ha dictado una sentencia desfavorable para Argentina en relación con la manipulación de las estadísticas públicas del Producto Bruto Interno (PBI) en 2013, durante el último gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Como resultado, Argentina deberá pagar 1.300 millones de euros a los bonistas afectados.

El especialista Sebastián Maril informó a través de su cuenta en "X" que se ejecutará una garantía de 313 millones de euros, depositada por Argentina en marzo de 2024 mediante una carta de crédito emitida por el Banco Santander.

El caso se originó cuando varios fondos de inversión que poseían bonos del canje de 2005, los cuales incluían un "cupón PBI", demandaron al país argumentando que Argentina modificó el cálculo del crecimiento del PBI para evitar un pago adicional. Según los términos del bono, Argentina debía pagar si su PBI crecía más del 3,3% anual. En 2013, el cálculo oficial arrojó un crecimiento de 3,2%, lo que evitó el pago, pero los bonistas alegaron manipulación de las cifras.

El fallo llega en un momento clave para el gobierno de Javier Milei, que ahora deberá decidir si procederá con el pago total de la suma de 1.300 millones de euros más intereses.