Después que las  empresas petroleras concretaran un aumento en el precio de las naftas y el gasoil de 3% el jueves, horas después añadieron un adicional de 2,5% en la CABA para achicar la brecha con las provincias, donde históricamente el valor del litro es mayor.

Con ese adicional, el costo del litro en surtidor se incrementó más de 5% en la Ciudad, un porcentaje mayor al que en el resto del país.

Estos aumentos ocurre, mientras no se recupera el consumo de combustibles que lleva 7 meses de caída.