El Gobierno de Argentina ha dado un paso significativo en la modernización de la Administración Pública al ampliar el alcance de la firma digital, permitiendo la formalización de trámites y contratos de manera remota. Mediante el Decreto 743/2024, publicado recientemente en el Boletín Oficial, se establece que la verificación de identidad podrá realizarse de manera virtual, sin la necesidad de trámites presenciales, lo que marca un cambio importante en la forma en que se gestionan estos procedimientos.

La normativa permite que la validación de identidad se realice en tiempo real, confrontando los datos con el Registro Nacional de las Personas (RENAPER). Además, se introducen modificaciones en el régimen de Certificadores Licenciados, permitiendo que las funciones de validación de identidad y otros datos puedan ser delegadas a "autoridades de registro". Esto elimina el requisito de presencialidad que hasta ahora era obligatorio, ya que los solicitantes debían comprobar su identidad y otros datos relevantes de manera presencial.

El decreto, firmado por el presidente Javier Milei, el jefe de Gabinete Guillermo Francos y el ministro de Desregulación y Transformación del Estado Federico Sturzenegger, forma parte del proceso de modernización tecnológica en el que está inmersa la Administración Pública. El objetivo principal de esta medida es incrementar la relación directa entre la administración y los ciudadanos, facilitando el acceso a los organismos del Estado y agilizando los trámites administrativos.

El texto oficial del decreto subraya que "la presencia física del solicitante o suscriptor ante el Certificador Licenciado o sus Autoridades de Registro no será condición ineludible" para la emisión, renovación o revocación de certificados digitales, lo que representa un avance significativo en la simplificación de estos procesos.

Esta medida se suma a las iniciativas implementadas desde la aprobación del Plan de Modernización del Estado durante la presidencia de Mauricio Macri, cuyo objetivo es facilitar el acceso de los ciudadanos a los servicios del Estado, incrementar la transparencia y mejorar la accesibilidad mediante el uso de herramientas tecnológicas que permitan un acceso remoto y un seguimiento efectivo de la actividad administrativa.

La implementación de la firma digital remota es un paso clave para agilizar la burocracia estatal y fortalecer la interacción entre el Estado y los ciudadanos en un mundo cada vez más digitalizado. Con esta medida, Argentina avanza hacia un modelo más eficiente y moderno de administración pública, alineado con las tendencias globales de digitalización.